Zapatero anuncia que volverá a ser «vecino» de León cuando abandone La Moncloa
Pide a Herrera que sea «prudente» y reconozca las inversiones del Gobierno en la Comunidad
M. gajate / M. serrador
«En un año me instalaré de manera continua y permanente a la que ha sido la ciudad de mi vida y mi corazón, donde podréis seguir contando conmigo». Hasta en tres ocasiones reiteró ayer el presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero, su inminente ... regreso a su ciudad, León, tras su anunciada retirada, y con una insistencia que hacía notar sus ganas de abandonar La Moncloa en el mitin de apertura de la campaña electoral, en el que reclamó a los populares que «reconozcan» la realidad de sus inversiones al tiempo que colgó una serie de medallas evitando mencionar los incumplimientos que le mantienen en deuda con su tierra.
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«Necesitaría un mitin de 24 horas para nombrar todas las obras y la transformación que hemos hecho en León». Zapatero se presentó «como leonés y como futuro vecino» tras el anuncio de una retirada que le forzaba a hacer frente a los deberes que le puso su tierra hace siete años.
No llenó el Pabellón
Lejos de justificar o argumentar sus incumplimientos, el presidente del Gobierno esbozó una larga lista de iniciativas apoyadas ante el entusiasmo del Pabellón de Deportes, que no consiguió llenar, desde cuyas gradas les exclamaba «gracias a tí».
En esta carrera electoral, Zapatero instó al presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, a que reconozca las «cosas como son», porque pese a que le tiene por un «hombre prudente» aseguró no comprender como no ve que el actual Gobierno ha invertido «como nunca nadie en Castilla y León» en comparación con cualquier etapa popular. El socialista alardeó de haber «ganado el futuro» para León con «proyectos transformadores y de futuro», que en realidad no están conclusos, que reclamó al PP que no nieguen, porque por su parte «ha cumplido».
La segunda referencia a Herrera fue para retarle a poner en marcha un plan para los ayuntamiento «con criterios de igualdad, independientemente del color político y con criterios sólo de población», en clara referencia al Plan E del Gobierno.
Con el debut de la campaña electoral en su tierra, Zapatero prestó su apoyo al candidato a la Alcaldía de esta ciudad y al aspirante a la Presidencia de la Junta, Francisco Fernández y Óscar López, respectivamente, que serán los que tendrán que enfrentarse a las urnas este 22 de mayo y cargar con el riesgo de que el voto en clave nacional les eche en cara la cuasi utópica autovía León-Valladolid, la demora del AVE, los puestos de trabajo que Zapatero cuantificó en miles en el Inteco y la Ciuden y que se mide en cientos o un reglamento de ayudas al carbón que pone fecha de caducidad a la minería contra en el que no luchó para evitarlo durante su presidencia de la UE. No obstante, aseguró que «no pido el voto para mí, sino para los candidatos y lo pido más fuerte que si lo pidiera para mí».
El presidente del Gobierno dejó ayer su huella en la campaña electoral leonesa en la que abandera al candidato a la Alcaldía que deberá enfrentarse con el aspirante popular a regidor, Emilio Gutiérrez, en cuyo equipo figura como número tres Agustín Rajoy, primo del presidente del PP. Una batalla entre dos bandos,
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