CUPRA DarkRebel, los sueños se hacen realidad

En los 4,5 metros de largo, 2,2 de ancho y solo 1,3 de alto del DarkRebel, se concentra toda una declaración de intenciones por parte de CUPRA y de su director de diseño, Jorge Díez: «DarkRebel es un 'Design Manifesto', una forma de mostrar el ADN de la marca y su ambición, de empujar y buscar algo nuevo, eso es lo que hace la diferencia en CUPRA». Sobre la pregunta de si podría llegar a hacerse realidad Jorge Díez es claro pero deja una puerta abierta: «De momento es solo eso, un concepto, pero en el grupo hay plataformas y tecnología que, con algunos cambios, servirían para que el DarkRebel pudiera llegar a producirse. En cuanto a diseño también habría que hacer modificaciones para homologación, como ocurrió con Tavascan, pero siempre queremos empezar muy arriba, para mostrar al mundo que vamos muy fuertes. Las cosas imposibles son las que te ponen los retos».

La iluminación y el juego con la luz dan vida tanto el exterior como el interior del CUPRA DarkRebel. En apariencia no tiene faros pero su iluminación se proyecta a través de la carrocería y de su especial y cambiante color, inspirado en el mercurio, que ha necesitado hasta siete capas de pintura. Las formas angulosas y las aristas marcadas, junto con sus espectaculares puertas de apertura vertical, marcan el estilo de este concept que nació en el metaverso. Los logos delantero y trasero iluminados, sus llamativas llantas con un carenado transparente para conseguir la máxima aerodinámica y a la vez mostrar su interior, y el cambiante color de su carrocería, crean una imagen única para este deportivo creado en el centro de diseño de CUPRA en Martorell, Barcelona.

En el habitáculo todo es diferente, como dice Jorge Díez. «En CUPRA no utilizamos materiales nobles clásicos como el cromo, la madera o las pieles. Buscamos alternativas como el neopreno y en este caso en el DarkRebel hemos utilizado en toda la parte inferior un material completamente sostenible y orgánico con un 90% de bambú». Una llamativa y espectacular consola central, realizada en aluminio por impresión 3D, es el eje sobre el que se mueven tanto los asientos como la instrumentación. Los dos baquets tienen una zona transparente en su parte superior que en realidad son proyectores. El aparente color neutro de todo el interior cambia con la iluminación que proyecta esa zona alta de los asientos mientras que otros proyectores en la parte trasera modifican el aspecto y la decoración de los paneles de las puertas. El habitáculo cambia por completo gracias a los juegos de luz, que se adaptan a cada momento y cada forma de conducción.

El aparente minimalismo interior esconde mucha tecnología que se adapta a cada momento y a cada usuario. «Parece que solo hay una pantalla pero en realidad son dos porque desde el techo se proyecta información sobre una parte del salpicadero. El conductor tiene otra pantalla más centrada en él, donde se muestran los datos de conducción», nos explica Jorge Díez. Incluso las salidas de aire están camufladas y solo se hacen visibles cuando aumenta el flujo de ventilación. Todo cambia en función de cada uno de los tres modos de conducción en los que puede funcionar el DarkRebel y Díez nos lo cuenta. «El primero de ellos más neutro, para la conducción diaria, otro más racing que muestra el trazado del circuito por el que se circula y un tercero más basado en el metaverso que ofrece la posibilidad de interactuar con el resto de la comunidad», así lo ha imaginado su diseñador. El CUPRA DarkRebel nació en el metaverso, con la contribución de más de 270.000 configuraciones de la Tribu CUPRA, los entusiastas de la marca, y sigue conectado con ese mundo digital, incluso desde aquí, el universo en tres dimensiones de la realidad física.