Corea del Sur confirma la eliminación de su ministerio de Igualdad

Cumple así una promesa de campaña el nuevo presidente Yoon Sul-yeol , líder del Partido del Poder Popular (PPP) , quien en las elecciones del pasado marzo se impuso al candidato del Partido Democrático (PD), Lee Jae-myung. Su propuesta despertó una enorme polémica e hizo de las políticas de género el punto focal de los comicios. El apoyo popular se inclinó de su lado por 0,73 puntos porcentuales, apenas 247.000 votos , el resultado más ajustado en la historia de Corea del Sur.

A la hora de lanzar su controvertido envite, Yoon contó con el asesoramiento de Kim , política de carrera y antes investigadora especializada en economía . Hace un mes, esta accedió al cargo con el cometido de ser la última en ostentarlo. «Tras mi nombramiento me reuní con representantes políticos que trabajan sobre el terreno para escuchar sus opiniones y dificultades . He descubierto que ambas partes creemos que es el momento de buscar un nuevo camino», explicaba, antes de aclarar: «Las funciones de la institución no serán descartadas, sino que experimentarán una transición».

Creado en 1998 como una « Comisión Presidencial sobre Cuestiones Femeninas », el ministerio adoptó su forma actual en 2001, aunque a lo largo de la última década ha perdido y recuperado en repetidas ocasiones la coletilla « familiar ». Desde entonces, erráticas medidas como la implementación en 2006 de un sistema de pagos a aquellos hombres que no contrataran los servicios de prostitutas durante Año Nuevo o un proyecto de censura de videojuegos en 2011 han provocado sucesivas iniciativas populares reclamando su desaparición. En la actualidad, su pr esupuesto anua l alcanza 1,4 billones de wones – 1.000 millones de euros , casi el doble de los 525 millones destinados en España al organismo equivalente–.

El presidente Yoon ha expresado en repetidas ocasiones su convicción de que la discriminación de género « es algo del pasado ». Por este motivo, anunció que a la hora de formar su Gobierno no aplicaría cuota alguna y nada más que el « mérito » guiaría sus decisiones ; planteamiento tan criticado como el resultado: solo cuatro de los veinticinco ministerios del país están liderados por mujeres.

Yoon, sin embargo, pareció suavizar su postura semanas después haciendo referencia al proceso de selección. «Uno de mis asistentes me dijo que la pu ntuación de una candidata , inferior a la de sus competidores, podría deberse a una discriminación sistémica basada en el género y, por lo tanto, su resultado no reflejaría necesariamente que ella era menos competente», apuntó durante un evento público a finales de mayo, en declaraciones recogidas por medios locales.

Unos días antes, el ministerio en cuestión publicó los datos de su encuesta anual. «El nivel de igualdad de género percibida por la población ha mejorado , pero sigue habiendo un serio desequilibrio en materia laboral, de cuidados familiares y de violencia contra las mujeres», señalaba el documento oficial. El 65% de las surcoreanas y el 41% de los surcoreanos cree que la estructura social discrimi na a las féminas; mientras que un 6 y un 17 , respectivamente, defiende que los hombres salen peor parados.

«Pondremos en marcha un equipo específico para dotar a la institución de un nuevo paradigma. Este mantendrá reuniones con expertos para encontrar un nuevo modo de llevar sus objetivos político s», proseguía Kim durante la rueda de prensa. «Aunque muchos creen que las razones para el conflicto [de género] derivan de brechas económicas y generacionales , tenemos que trabajar con un análisis más profundo basado en evidencias científicas », concluyó la todavía ministra. Habrá quien albergue la esperanza de que la decisión de Corea del Sur no se generalice, de modo que en materia de igualdad siga habiendo diferencias.