Cuestan 35 euros, se venden en Ikea y son las sillas perfectas para 'tomar el fresco' en Sevilla

Pensando precisamente en eso, y en la expresión que todos hemos escuchado alguna vez, «el que fue a Sevilla perdió su silla», IKEA ha lanzado una campaña bastante ingeniosa para presentar un nuevo modelo de silla plegable. Se llama SUNDSÖ, cuesta 35 euros y se puede encontrar tanto en la tienda de Castilleja de la Cuesta como en su web.

La gracia está en que como la silla se pliega y apenas pesa, te la puedes llevar contigo a donde vayas. Así no hay riesgo de que nadie te la quite si te ausentas un rato. En IKEA han aprovechado bien la broma a través de una publicación en su cuenta de TikTok, donde se ve una mesa con dos sillas y el texto «Antes de ir a Sevilla»; en la siguiente imagen, ya no están las sillas: «Después de ir a Sevilla». Y para rematar, muestran el modelo SUNDSÖ con el mensaje: «Para no perderla: pliégala y llévatela contigo a donde quieras».

Más allá del chiste, la silla tiene sentido. Es plegable, ligera, viene premontada y no ocupa nada cuando la recoges. Ideal si vives en un piso con balcón estrecho o si simplemente no quieres tener las sillas plantadas todo el año. También es útil si la necesitas para un negocio y buscas algo práctico que puedas mover fácilmente.

Está disponible en varios colores: amarillo (como el de la foto), verde claro, azul oscuro, hueso y antracita, que además ahora está rebajado a 25 euros. En tienda física te la puedes llevar directamente, y si la compras online, el envío tiene un coste de 4,95€.

Otra ventaja es que si al final no te apañas con ella, puedes devolverla hasta 90 días después de la compra, o hasta 120 días si eres de IKEA Family. Así que hay margen para probarla con calma.

No es una silla que vaya a cambiarte la vida, pero cumple con lo que promete: se pliega, es fácil de guardar y te saca del apuro cuando necesitas una silla extra sin complicarte. Para el verano en Sevilla, donde tomar el fresco es obligatorio siempre que se pueda, puede ser una solución práctica, sobre todo si no tienes mucho espacio. Y quién sabe, quizá esta vez no pierdas la silla al ir a Sevilla. La llevas contigo, te sientas donde quieras y listo.