A juicio por pegar y tirar de los pelos a su novia, a la que dejaba encerrada en la casa prohibiéndole salir

Esto es sólo una muestra de los hechos que recoge la Fiscalía de Sevilla en el escrito de calificación provisional en el que solicita tres años y medio de cárcel para el varón como presunto autor de un delito de lesiones en el ámbito familiar en el domicilio y un delito de violencia habitual en el ámbito familiar.

Un tribunal compuesto por tres magistrados de la Sección Cuarta de la Audiencia de Sevilla tiene previsto juzgar los próximos miércoles y jueves a I.G.P. por el supuesto maltrato infligido a S.V.G., con la que inició una relación sentimental en enero de 2011 y que subsistió hasta octubre de 2013.

En un primer momento, según el escrito de acusación del Ministerio Público al que ha tenido acceso este periódico, estos novios se fueron a vivir a un pueblo del Aljarafe. Después se trasladaron a una parcela en el campo propiedad de los padres del encausado en el entorno de Doñana en la provincia de Sevilla .

A los tres meses de comenzar la relación , el acusado, según la Fiscalía, comenzó a pegar a la mujer, «la tiraba al suelo, la zarandeaba, la lanzaba contra la pared, le tiraba de los pelos».

En otras ocasiones, «le hacía cambiarse de ropa si a él no le gustaba la que llevaba, le aisló de sus familiares y amigas , le prohibía salir del domicilio sin el consentimiento de él, llevándose éste las llaves de la cancela exterior de la finca para asegurarse de que ella no podría salir».

Además de las agresiones físicas se producían, según detalla la Fiscalía, ataques verbales e insultos continuos como «puta, guarra o perra» . En algún episodio le llegó a proferir que «no servía para nada».

A finales del mes de septiembre de 2013, estando ambos aún conviviendo juntos, ella le expresó a su entonces pareja y hoy acusado que creía que «la estaba engañando con otras mujeres». Aquello provocó una reacción violenta en el varón, que se abalanzó sobre ella, quien logró encerrarse en el cuarto de baño , donde pasó toda la noche.

A la mañana siguiente, el acusado la convenció para que abriese la puerta del baño. Entonces se volvió a dar un episodio de violencia sobre la mujer . El varón la cogió de los pelos, la tiró contra la pared, después contra el suelo y le propinó varias patadas en piernas y costado».

Este ataque hizo que S.V.G. sufriera policontusiones por todo el cuerpo. Además, este maltrato físico y psíquico continuado sufrido por la joven produjo en ella un trastorno de estrés postraumático.

Estos hechos para la Fiscalía constituyen un delito de lesiones en el ámbito familiar en el domicilio y un delito de violencia habitual en el ámbito familiar, del que sería autor el acusado, para quien pide un año de cárcel por el primero y dos años y medio de prisión por el segundo. Además, reclama una medida de alejamiento y la privación de la tenencia y poret de armas.