La Feria de Dos Hermanas se convierte en escenario de protestas

La Feria de Mayo de Dos Hermanas (Sevilla) se ha convertido en un escenario de protestas de diversos colectivos, afectados por diferentes problemas. Además de la diversión, el cante y las sevillanas, por el Real de la Feria también se han podido ver pancartas y pitadas de los manifestantes reivindicando sus casos. No es la primera que ocurre, ya que en los últimos años colectivos como la Policía Local, han trasladado sus protestas al Real.

En este sentido, los trabajadores de Saimaza , afectados por el cierre de la fábrica ubicada en el Polígono Industrial La Isla, se concentraron este miércoles frente a la portada, aprovechando el tradicional acto de inauguración del alumbrado. Bajo el lema « Saimaza no se cierra », unos 70 empleados y representantes sindicales recorrieron las calles del Real para «dar a conocer a los nazarenos» la situación por la que pasan.

La multinacional Mondelez International ha anunciado el cierre de la planta debido al descenso de la producción , como consecuencia de la crisis económica, y acentuada también por el incremento del segmento monodosis. El comité de empresa, que ya ha mantenido la primera reunión con la directiva, se reúne este viernes en asamblea con el resto de trabajadores para informarles de la situación y estudiar posibles protestas. Por lo pronto, la plantilla tiene intención de iniciar una serie de encuentros con partidos políticos y administraciones públicas.

Sin embargo, no fueron ellos los únicos que protagonizaron sus actos reivindicativos en el Real. La asociación « Entrenúcleos BPO6 » se concentró frente a una caseta donde en su interior se encontraban miembros del Gobierno municipal. Aseguran sentirse discriminados por parte del Ayuntamiento, después de que el Pleno aprobara una partida presupuestaria para devolver las cantidades entregadas –unos 10.000 euros de media- únicamente a los afectados que subrogaron sus derechos al Consistorio.

El colectivo de afectados también se detuvo frente a la caseta del Partido Popular, en protesta por haber apoyado en el Pleno esta partida de más de 1’4 millones de euros. Los populares explicaron durante la votación que lo hacían «por coherencia» con la política que viene desarrollando de apoyo a las VPO, pero que estaban en contra al considerar que se trata de un « chantaje » y un « agravio comparativo ».