Los padres del Manuel Alonso sacan a sus hijos de clase por temor a la estabilidad del edificio

Desde hace días los padres realizan movilizaciones para advertir de la situación del inmueble que raya en la insalubridad: suelos mojados permanentemente los días de lluvia porque las ventanas cierran mal, humedad del 75 por ciento, malos olores de los baños, temperaturas de 8 grados, clases pequeñas, barreras arquitectónicas y falta de salidas alternativas en caso de un incendio o similar. Pero al descubrir la grieta que surca una clase de segundo de Primaria, han puesto por encima de todo la seguridad física de sus hijos. En un edificio con más de cincuenta años esta circunstancia les hace temer por la estabilidad del inmueble.

La alcaldesa, Ana Isabel Jiménez visitó el jueves el colegio, pero sin reunirse con los padres, con los que no ha tenido ningún contacto hasta ahora. Según el gobierno local lo hará la próxima semana. Ayer estuvieron en el centro la delegada municipal de Educación, María Jesús Campos y varios técnicos municipales y de la delegación provincial. Dijeron verbalmente que el edificio no tiene problemas de estabilidad, pero los padres quieren un informe técnico por escrito en el que se les garantice la seguridad del edificio y la de sus hijos. Hasta ahora no se lo han facilitado.

 El gobierno local se ha comprometido a que el lunes, técnicos de la Junta visitarán el edificio para comprobar su estado y evaluar el riesgo estructural. Los responsables municipales han reconocido a los padres que el aulario debe demolerse y construirse unas nuevas instalaciones. Pero no ofrecen una fecha para hacer la obra. Por ahora sólo afirman que desde el Ayuntamiento están trabajando en «diversos informes técnicos» para evaluar el estado del edificio.

 El lunes volverán los problemas para los niños. ¿Dónde van a recibir clase? En el resto del colegio Manuel Alonso no sobra sitio. Las alternativas que se han barajado por parte de la dirección y de los padres suponen que el colegio pierda todos sus espacios comunes. Serían medias como partir el salón de actos para situar dos clases en él  o quitar el aula de informática. Ambas a la vez ya que hay cuatro clases que reubicar.

El PP de Alcalá por su parte ha entrado en la polémica que rodea al colegio y h a culpado al gobierno socialista de «actitud pasiva e irresponsable» . Según afirman los populares, los responsables municipales «se han limitado a aguantar el chaparrón" de los padres, pero que en definitiva, no ha conseguido lo más mínimo de Susana Díaz, que se comprometió personalmente con el CEIP Manuel Alonso, cumpla con sus promesas».

Desde el PP recuerdan que PSOE y Ciudadanos votaron en contra en el Parlamento Andaluz de una enmienda a los presupuestos para incorporar una partida presupuestaria con la que realizar las obras del colegio Manuel Alonso.