El director territorial de la Zona Sur de Telefónica, Joaquín Segovia, ha destacado la importancia de la sostenibilidad para la multinacional española de telecomunicaciones, y ha subrayado que «la transición verde nos afecta a todos». En este sentido, Segovia considera que las empresas «deben tener conciencia y medir el impacto» que tiene su actividad en el medio ambiente «para tenerlo en cuenta en sus decisiones operativas».
Telefónica lleva más de dos décadas trabajando en este campo, ha recordado Segovia, tras remarcar que fue pionera entre las compañías del Ibex en crear un consejo específico y también en la emisión de bonos verdes.
Los tres ejes de su estrategia, ha apuntado Segovia, son impulsar la transición verde luchando contra el cambio climático mediante la tecnología, buscar el mayor progreso de la sociedad para «que nadie se quede atrás», y «liderar con el ejemplo». En este punto, el director territorial Ha apuntado que el 20% del variable de la dirección está vinculado al complimiento de los objetivos de desarrollo sostenible.
Para Joaquín Segovia, la digitalización ayuda a las empresas a hacer la transición verde y cree que estamos en «un cambio de era» en el que se generan oportunidades y retos y en el que «la tecnología es un habilitador».
Del cobre a la fibra
En este proceso de transición digital sostenible, «es fundamental» mantener estable el consumo de electricidad, apunta Joaquín Segovia. Así, puntualiza que el consumo energético de las redes de datos se ha multiplicado y ha recordado que en el primer año de pandemia, 2020, aumentó un 40% el tráfico en las redes y en 2021 se ha mantenido un repunte del 12%, «sin que ello haya afectado a la calidad de nuestras redes», ha asegurado. Para lograr este consumo energético estable, Telefónica ha diseñado un plan de eficiencia y la evolución del cobre a la fibra en sus redes.
En paralelo, la compañía ha trazado un plan Cero residuos hasta el año 2030 que se articula en varias líneas de actuación. Entre ellas, el «ecodiseño» o diseño de sus productos y servicios pensando en su impacto medioambiental; la reutilización de equipos para darles una segunda y tercera vida útil; y el reciclaje de residuos. En este último punto, Telefónica, en los 12 países en los que opera, ha logrado reutilizar cinco millones de quipos electrónicos, entre ellos, 300.000 teléfonos móviles.
La compañía de telecomunicaciones ha creado un sello para que los clientes puedan comprobar «cómo de sostenible es su móvil y su impacto medioambiental».
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