Coyuntura
Andalucía, entre el optimismo económico y el miedo a la recesión
El Gobierno autonómico prevé un récord de PIB cercano a 196.000 millones de euros en 2023 y que se mantenga la creación de empleo
Diferentes servicios de estudios alertan del debilitamiento económico pero pronostican crecimientos
Sevilla
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Iniciar sesiónVienen más dificultades, pero nadie vislumbra todavía en el horizonte una crisis económica grave, equiparable a la que se desencadenó a partir de 2008. En las proyecciones macroeconómicas que se han publicado hasta ahora sobre Andalucía, los diferentes servicios de estudios omiten la palabra recesión. ... Debilitamiento, ralentización o frenazo generalizado del crecimiento son los términos que se utilizan. Todos admiten que el paronama global es sombrío e incierto y alertan de que las proyecciones están sujetas a muchas incertidumbres y a un balance de riesgos que puede provocar revisiones generalizadas a la baja. Como máximo aceptan que en próximos trimestres puedan producirse leves crecimientos negativos que desencadenen una recesión técnica pero no profunda.
El cuadro macroeconómico que ha dibujado el Gobierno andaluz en el proyecto de Presupuestos para 2023, presentado por la consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España, prevé un crecimiento real del Producto Interior Bruto (PIB) regional del 4,3% para este año y del 1,9% para 2023, en un contexto de alta inflación, aumento de los tipos de interés, tensiones geopolíticas vinculadas a la guerra de Ucrania y de riesgos en torno al Covid que aún persisten.
La Airef (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal) ha calificado de «optimista» la previsión de crecimiento del Gobierno andaluz para 2022, por «el rápido deterioro que están registrando la mayoría de los indicadores de la actividad económica y por las perspectivas de empeoramiento del crecimiento económico de los principales socios europeos». Sin embargo, considera factible el pronóstico para 2023, aunque supera en ocho décimas el 1,1% de incremento del PIB estimado por la propia Airef para el año próximo en Andalucía.
El Ejecutivo regional mantiene la expectativa de que la comunidad autónoma crecerá ligeramente por encima de la media nacional el año que viene, basándose en los últimos pronósticos realizados por el Banco de España y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que apuntan crecimientos de la economía española del 1,4% y el 1,2%, respectivamente, para el año 2023.
El avance esperado para la región, según la Junta, también sería superior al pronosticado para el conjunto de la Zona Euro (0,9% según el Banco Central Europeo; 0,5% según el FMI); y confía en «dar continuidad al proceso de convergencia económica con Europa».
Los técnicos de Economía del Gobierno autonómico vinculan el frenazo económico previsto para 2023 con un cambio en la evolución del negocio exterior, que tendrá una contribución negativa al crecimiento regional, en contraste con el récord exportador alcanzado por la región durante el presente año.
Se prevé que en el próximo ejercicio todos los sectores contribuyan positivamente al crecimiento de la economía regional, con una mayor intensidad en el ritmo de los sectores de la construcción y la agricultura, si bien este último lastrado por la incertidumbre y la preocupación que genera la sequía.
«Con esa evolución esperada para el deflactor del PIB y el crecimiento real previsto, la economía andaluza registraría en 2023 un crecimiento del PIB del 6,5%, en términos corrientes, que situaría el PIB nominal de la comunidad autónoma próximo a los 195.900 millones de euros«. De cumplirse este objetivo, Andalucía alcanzaría su mayor peso económico de la historia el próximo año.
Mercado de trabajo
En el ámbito laboral, según el marco oficial del proyecto presupuestario de la Junta, el crecimiento de la economía andaluza en 2023 se traduciría en un aumento de la población ocupada estimado en el 2,1%, 1,1 puntos inferior al previsto para 2022 (3,2%), lo que supondría crear unos 68.300 empleos. Con ello, la población ocupada se aproximaría a las 3.320.200 personas, una cifra de personas trabajando sin precedentes en la región.
Este aumento de la ocupación reduciría un punto porcentual la tasa de paro hasta situarse por debajo del 19% de la población activa.
Las previsiones de las instituciones privadas no están muy alejadas de las del Gobierno andaluz, aunque recientemente se han producido revisiones a la baja de algunos de los servicios de estudios, como el de Universidad Loyola Andalucía, sin diferir de forma drástica. Incluso en la variable del empleo, el último informe Loyola Economic Outlook (LEO) presentado el pasado 25 de octubre prevé que el paro regional baje al 18%, una tasa que no se alcanza desde 2008 y que mejora incluso las perspectivas del equipo económico de Juanma Moreno.
Loyola ha rebajado las previsiones y estima un crecimiento del PIB regional del 3,9% para este año en Andalucía y del 1,3% en 2023.
Sobre la temida recesión, Manuel Alejandro Cardenete, catedrático de Economía de la Universidad Loyola y uno de los expertos que participa en la elaboración de LEO, considera que Andalucía va a mantener el año próximo un crecimiento económico «muy suave», y apunta que «lo que sí se va a producir con alta probabilidad» en el último trimestre de este año y el primero del próximo son tasas de crecimiento trimestrales del PIB ligeramente negativas, de entre el -0,2% y el -0,3%, aproximadamente.
«Por tanto, desde un punto de vista formal, eso se va a llamar recesión ya que la definición técnica de la recesión son dos trimestres negativos«, apunta Cardenete.
¿Eso es como para hacer saltar todas las alarmas? «No necesariamente, porque si todo va como debe de ir y no se presenta ninguna otra novedad en el futuro, lo normal es que en el segundo trimestre nos recuperemos, de forma que en el cómputo anual lleguemos a un crecimiento por encima del 1% en Andalucía», responde el economista.
BBVA Research también ha presentado su observatorio regional de octubre, que da crecimientos del PIB andaluz del 4,3% y del 0,9% para este año y el próximo. En empleo es más conservador que Loyola y prevé repuntes de la ocupación del 3,4% y el 0,9%, en línea con el PIB.
«Esta desaceleración ya se observa en los distintos indicadores de empleo y gasto, lo que podría llevar a un estancamiento o incluso a alguna caída durante los próximos meses. Sobre todo conforme la inflación continúe elevada y reduzca el poder adquisitivo de los hogares«, señala Miguel Cardoso, economista jefe para España en BBVA Research. Añade que el impacto de la subida de los tipos de interés se irá notando durante los próximos meses, en la medida en que se vayan actualizando las cuotas hipotecarias.
Corto y poco intenso
«En todo caso, esperamos que este escenario sea corto en duración y de reducida intensidad. Detrás de este razonamiento está la buena situación financiera de familias y empresas, la falta de desequilibrios importantes en algún sector (por ejemplo el inmobiliario) y la percepción de que durante los próximos meses se debería acelerar la ejecución de los fondos relacionados con el programa NGEU«, concluye el experto.
El Observatorio Económico de Andalucía (OEA), que preside el economista Francisco Ferraro, es el servicio de estudios que mejor expectativa de crecimiento da para Andalucía en 2023, un 2%, por encima incluso de las previsiones del Gobierno regional. Para 2022 coincide con la estimación más conservadora de Loyola (3,9%).
También Ferraro ha apuntado la posibilidad de que Andalucía entre en una fase de recesión técnica porque «podrían producirse crecimientos negativos en algún trimestre próximo», sin que ello se traduzca en una crisis profunda. El Observatorio es uno de los foros de expertos con más solera de Andalucía, en el que participa un amplio plantel de economistas, algunos de ellos ex-altos cargos del anterior Gobierno andaluz de PP y Ciudadadanos, como Rogelio Velasco y Manuel Hidalgo, o Elena Manzanera, la nueva presidenta del INE nombrada recientemente por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.
Por su parte, Analistas Económicos de Andalucía presentó su último informe de coyuntura en el mes de junio y, por tanto, sus proyecciones se han quedado desactualizadas. La sociedad de estudios del Grupo Unicaja Banco publicará un nuevo estudio en fechas próximas y ya avanza que tiene previsto realizar una revisión a la baja de sus estimaciones, en las que se tendrá en cuenta la evolución reciente de los principales indicadores económicos y financieros, así como la elevada incertidumbre que caracteriza el contexto actual.
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