Persan, Heineken, Cobre Las Cruces y Renault se unen para potenciar la industria en Sevilla

Para entender la potencialidad de este movimiento hay que partir de dos puntos. En primer lugar, se está produciendo en Europa un consenso sobre la importancia de contar con una participación significativa de la industria en la composición del PIB. Esta visión se sustenta en el mejor comportamiento de los países más industrializados durante la crisis y en su capacidad de promover y utilizar la innovación generada en diversas actividades terciarias, actuando como motor de ellas.

La Junta de Andalucía ha recogido el guante y ha transformado su discurso industrial respecto al de la década pasada. De hecho, ha establecido como objetivo de crecimiento elevar un 1% anual su participación en el PIB hasta 2020, partiendo del 12% actual. Esto son más de 1.400 millones de euros anuales adicionales de valor añadido. Por ello, Damien Marantelli, consejero delegado de Cobre Las Cruces; Richard Weissend, presidente de Heineken España; José Moya, presidente de Persan, y Alfonso García-Agúndez, director de la factoría de Renault en Sevilla, explicaron ayer este proyecto a Susana Díaz, presidenta del Gobierno andaluz.

¿Cuál es la situación de partida en Sevilla? Según el comunicado conjunto de CLC, Renault, Persan y Heineken «es indudable que el peso de la industria provincial es modesto, en comparación con otros sectores productivos y con otras zonas de España». Recuerdan que «entre 2000 y 2011 la aportación del sector industrial al Valor Añadido Bruto (VAB) provincial, según el INE, pasó del 18% al 14%, mientras que los servicios ascendieron del 68% al 72%, en un año en el que la agricultura representó el 4% y la construcción el 10% del VAB de la provincia». Además, aunque en los «últimos años ha habido un repunte por la consolidación de la producción aeronáutica y minera, se vienen produciendo situaciones preocupantes entre las que podemos mencionar el cierre de alguna planta de dilatada trayectoria o las dificultades por las que atraviesan otras que durante décadas han sido emblemas industriales de Sevilla».

El contrapunto positivo es que «en Sevilla hay una industria notable que cuenta con firmas punteras, con claros liderazgos nacionales». De ahí que no sea «justo ni tampoco real, etiquetar a la provincia como un desierto industrial». Las cuatro enseñas que impulsan esta iniciativa «son un claro exponente de la diversidad, calidad e internacionalización de la industria de Sevilla que representan sectores totalmente diferentes que elaboran productos muy reconocidos (cerveza, cajas de cambio, detergentes y productos de limpieza y cobre)». Tres tienen propietarios no españoles (Heineken en Países Bajos, Renault en Francia y Cobre Las Cruces en Canadá), mientras que la cuarta, Persan, es propiedad «netamente local» y ha demostrado que desde Sevilla se puede ser un líder europeo.

Cobre Las Cruces, Heineken, Persan y Renault representan las mayores inversiones industriales en la historia reciente de la provincia -más de 1.600 millones de euros en los últimos 10 años- demostrando que «esta provincia es un lugar atractivo para invertir; y tienen un elevado componente tecnológico y de I+D+I, que refuerza el mensaje de industria de vanguardia».

Sevilla es Industria se pondrá en marcha a principios de 2015 con dos líneas de actividades iniciales. La primera, de carácter interno, «persigue fortalecer las relaciones entre los miembros de la plataforma en campos de gran interés estratégico, como la formación, la identificación de oportunidades de mejora, el aprovechamiento de sinergias en la cadena de suministros y experiencias de Responsabilidad Social». En cuanto a las actividades de carácter externo, «la formación ocupará igualmente un lugar preferente (como de hecho ya viene ocurriendo con el programa #Talentage de Heineken, la Escuela Industrial de Cobre Las Cruces, los cursos de Emprendimiento de la Fundación Persan y otras experiencias desarrolladas por las empresas)».