Los toldos no llegarán a la Avenida de la Constitución de Sevilla para el inicio del verano

El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ya advirtió hace días que su gobierno había «desbloqueado» y «mejorado» el proyecto para dotar de sombra la Avenida de la Constitución, aunque lo cierto es que todavía no cuenta con la autorización de la Comisión de Patrimonio, que debe dar el visto bueno al ser un entorno BIC. El único pronunciamiento que existe por parte de este organismo data del 31 de enero de 2024, fecha en la que se aprobó el estudio previo presentado por el Ayuntamiento, aunque con algún reparo. Se indicaba, según recoge el acta de la reunión, que era «condición» que en las farolas se mantuviera «el conjunto lumínico de dos brazos y tres farolas».

En la resolución emitida también se ponía de manifiesto que se trataba de una valoración preliminar y, por lo tanto, se instaba a registrar un proyecto definitivo para su análisis y autorización. Fuentes municipales confirmaron que la próxima semana se hará un ensayo en la Avenida y que si el resultado es positivo se remitirá el diseño a Patrimonio, que debe dar su autorización. A partir de ahí, habría que proceder a licitar el contrato de instalación, lo que hace imposible por plazos que lleguen al inicio de verano y muy complicado que estén para este año. Aún así, el gobierno municipal no descarta que sea posible, pero para ello deben darse tantos condicionantes que lo convierten en una verdadera utopía.

La sombra en los puentes fue otra de las promesas de Sanz que tampoco llegará para este año. Este asunto es algo más complejo, pues en mayo de 2022 el anterior gobierno municipal licitó la redacción de un proyecto que no se formalizó hasta septiembre de 2023. La empresa Ayesa fue la adjudicataria del contrato por valor de más de 600.000 euros y divido en dos lotes. Uno primero que se centraba en los puentes de Los Remedios, San Telmo, Triana, Cristo de la Expiración, la Cartuja y la Barqueta; y un segundo para los pasos sobre las infraestructuras ferroviarias: el puente de San Bernardo, el de José Laguillo, Samaniego, la avenida Alcalde Manuel del Valle, la Carretera de Carmona y la Ronda Urbana Norte.

El contrato establece un plazo de 12 meses para el primer lote y de 10 meses –ampliables– para el segundo, por lo que los proyectos no estarían acabados hasta después de este verano. Hay, además, otra casuística a tener en cuenta. El pasado junio, en una resolución del actual gerente de Urbanismo, Fernando Vázquez, se aclara que el coste se abonaría en parte con cargo al presupuesto de 2023 y otra parte –la mayor– al del 2024. En concreto, se dejaban pendientes más de 410.000 euros para las cuentas de este año, que no han llegado a aprobarse, lo que supone un nuevo inconveniente al que el gobierno municipal tendrá que hacer frente.

Lo que sí se ha licitado ya es el contrato para las lonas en el paseo Marqués de Contadero, el más avanzado de los tres. Con un coste de 166.000 euros en dos anualidades (2024 y 2025), está a la espera de adjudicarse a una de las dos empresas que se han presentado, Carpas Zaragoza y Heliopol. Las ofertas están aún en proceso de evaluación, luego tendrán que adjudicarse y firmarse el contrato, algo que el Ayuntamiento confirma que se producirá este mes. A partir de ahí, se establece un periodo de dos meses y medio para la fabricación de estructuras y el montaje de los toldos, aunque el gobierno insiste en que se adelantará. Tal es así que confirman que se colocarán en mayo.