Vacunación, peticiones de certificados Covid, test y citas saturan los centros de salud de Sevilla

ABC ha recorrido tres centros de Sevilla capital en la mañana de este miércoles y la estampa era similar en todos . A primeras horas de la mañana en el centro de Salud Mallen-Huerta del Rey, en la zona de Nervión había una cola de varios metros antes de que dieran las 9 de la mañana. Allí estaban los que iban a ponerse la tercera dosis de la vacuna contra el Covid-19 , pero también otros que esperaban su turno para pedir cita con el médico de Atención Primaria y los que acudían a pedir el certificado Covid que ya es obligatorio para entrar en el interior de los bares además de otras gestiones normales en los centros de salud.

Como además el aumento de los contagios ha hecho que la mayoría vuelva a intentar mantener la distancia de seguridad, la cola era más larga y desde primeras horas se prolongaba varios metros fuera de la puerta del centro.

Peor estaban este miércoles las cosas en el centro de Salud Esperanza Macarena que se ubica en la calle María Auxiliadora y que es sin duda uno de los que más público tiene por su ubicación entre la zona de la Puerta Osario y José Laguillo. Antes de las 10 de la mañana ya no cabía un alfiler en la planta baja, en el interior donde como es habitual, hay que coger número para ser atendido. El centro, que ahora tiene horario de 8 a 3 (lo que significa que no abre por las tardes) y en el que en las plantas superiores se ubican las especialidades, tenía esa hora el marcador en el número 82 .

Había numeroso público fuera haciendo cola, pero la mayoría estaba en interior repartido por la planta baja, quizás porque a esa hora estaba lloviendo y muchos preferían permanecer al resguardo del chapuzón que estaba cayendo. Los había sentados en las sillas que hay en la sala de espera pero también muchas personas esperando para que les atendieran en la ventanilla y otros haciendo cola para la sala donde están vacunando.

Los comentarios del público eran, en algunos casos, de hartazgo por la situación. «Llevo aquí desde antes de las ocho y a esa hora ya había cola», admitía José Manuel, un hombre que había acudido al centro de salud únicamente para recoger el papel de la baja médica de su esposa. Le habían dicho que el certificado estaba listo y que únicamente debía pasarse a recogerlo, pero no contaba con que iba a encontrarse esa larga espera para un trámite tan sencillo.

Otra mujer que se había presentado en el centro de salud a vacunarse sin cita previa se quejaba de que no le atendieran. «Eso que están diciendo que se puede venir a ponerse la tercera dosis sin cita no es verdad» , decía seguramente desconociendo que solo en determinados vacunódromos como el de la facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla se puede acudir sin haber concertado previamente la fecha y la hora.

Pero además, según comentaba el personal, es algo habitual que esté lleno desde hace algunas semanas , coincidiendo con el comienzo de la tercera dosis de la vacunación que también se ha juntado con la de la gripe.

«Los que vienen a por la tercera dosis están aquí. También hay que abarcar todos las personas que han dado positivo que llaman a Salud Responde y no les cogen el teléfono y que acuden al centro de salud y muchos que no se saben descargar el certificado Covid o los que lo han intentado y no han podido porque la aplicación de la Junta de Andalucía está bloqueada«, explicaba una trabajadora.

Por eso insistía en que el centro de salud tiene que asumir también las vacunas además de la Atención Primaria, los test de antígenos que hay que hacer, las bajas médicas y otros trámites habituales. Por eso, según decían «hay veces que da tres vueltas el marcador» . Eso significa que pueden encontrarse cada mañana con más de 300 personas y que cuando abren la puerta por la mañana ya se encuentran con gente esperando. Están saturados por falta de personal ya que son cuatro personas atendiendo para el numeroso público que llega cada día. Y eso sin contar cuando alguna de ellas tiene que salir por algún motivo.

La fotografía era muy similar en el centro de salud de Virgen de África en el barrio de los Remedios, donde la cola también salía fuera de la calle. Allí había también numeroso público esperando para todas las gestiones habituales. En este caso el dispensador de números está colocado en la fachada exterior , con lo cual no hace falta entrar en el interior del edificio para coger el número.

Y este miércoles había una persona dedicada expresamente a repartir los certificados Covid que numerosas personas mayores habían solicitado. Como además se trata de un barrio en el que viven mucha gente de más edad que no están familiarizadas con la aplicación del móvil, han organizado un dispositivo especial para ellos. En la puerta hay una caja donde hay que introducir la petición del certificado con los datos del DNI y tarjeta sanitaria. El centro de salud lo imprime y se lo facilita en papel a los que acuden a por él. Un trámite más que está asumiendo la Atención Primaria que, con la sexta ola parece volver a soportar cada vez mayor presión.