La Lotería de Navidad lleva la fiesta a Alcosa: un bar vende dos millones con un número que llegó de «rebote»

La felicidad de Macarena estaba justificada. Ha repartido tres millones de euros de este cuarto premio de la Lotería de Navidad 2021 con la venta de 15 series entre su ventanilla y en 'La Bodega', donde, según ha señalado el padre de Macarena a este periódico, llevaron algo más de cien décimos .

« Ha quedado íntegramente en el barrio, en Sevilla Este y Alcosa », confiesa Macarena, que a media mañana aún desconocía si ella está entre las agraciadas. Había dado segundos premios en Sorteo de la Hispanidad o en Euromillones, pero en sus nueve años al frente de la administración, que regenta a su hermano, nunca había dado un premio el 22 de diciembre.

Entre los afortunados que han pillado este miércoles un pellizquito está el equipo de seguridad del centro comercial . Ayer, sobre las ocho de la tarde, compraron el último décimo del 42833. Un décimo entre 16 personas, pero eso no importaba para brindar con champán junto a Macarena. « Es una paga extra de Navidad », reconoce una de las agraciadas. El jefe de seguridad sólo temía que se fueran todos los vigilantes a celebrarlo.

Del centro comercial la alegría saltaba al despacho de vinos 'La Bodega', en la calle Elda. En pleno Parque Alcosa, Miguel Ángel, el dueño del bar, se abrazaba con el padre de Macarena, la persona que le llevó los alrededor de cien décimos del 42833, que llegaron al bar «de rebote» después de que otro establecimiento del barrio no lo quisiera.

Allí se fundían en abrazos con todo el que llegaba. Miguel Ángel cuenta que está muy repartido entre sus clientes habituales. Abrió el bar en septiembre de 2019, después llegó la pandemia. Y ahora recibe esta magnífica noticia. Brindaron con champán, pero sobre todo con cerveza.

Los cánticos se repetían. El número y el premio eran los más repetidos. Las llamadas no cesaban. «No me digas que tú no llevas» , se podía escuchar. La calle Elda era una fiesta. Los coches pasaban haciendo sonar su claxón.

Emoción, alegría y alguna que otra lágrima. «Ya no voy a tener que pedir la paguita» , gritaba una vecina agraciada con diez mil euros porque repartía un décimo con una amiga. Otro bromeaba con que se iba a ir a Turquía para un implante capilar.