El Ayuntamiento de Sevilla restaurará todo el convento de Santa Clara con fondos europeos

Hasta la fecha, el Ayuntamiento ha invertido unos 8 millones de euros en distintas actuaciones desarrolladas en el Espacio Santa Clara desde que se hizo con el convento en 2001. Hoy, más de 20 años después, aún queda casi un 60% del monasterio sin rehabilitar de los más de 9.700 metros cuadrados construidos.

En estos momentos, se está ultimando la rehabilitación de la torre de Don Fadrique y los jardines del entorno, que reabrirán en verano. Se trata de un monumento histórico que está ubicado dentro del complejo y cuya intervención ha contado con un 45% del presupuesto financiado por el Ministerio de Fomento a través del programa 1,5% Cultural. Asimismo, el Arzobispado está ejecutando las obras de restauración de la iglesia y las dependencias colindantes, después de que el Consistorio cumpliera con el convenio y aportara los tres millones de euros necesarios. Y, al mismo tiempo, se está interviniendo el compás y la portada de Maese Rodrigo -ya acabada-, de forma que se recupere el acceso principal por la calle Santa Clara cuando reabra el templo.

Sin embargo, el gobierno municipal considera una prioridad continuar con la rehabilitación de todo el convento. Para ello, va a contratar una asistencia técnica especializada que elabore toda la documentación para poder presentarla a las convocatorias de ayudas y subvenciones estatales y europeas.

En el pliego de condiciones de este contrato, por valor de 241.971 euros , se especifica es necesario elaborar unos estudios técnicos previos. La empresa a la que se le adjudique el concurso tendrá que hacer una inspección pormenorizada de todas las edificaciones y espacios libres y realizar unas fichas de diagnóstico baremando la gravedad de las patologías que tiene cada estancia y el grado de prioridad para llevar a cabo las intervenciones. Así, se actualizará el cronograma de rehabilitaciones y se redactará el anteproyecto de rehabilitación del conjunto identificando también la distribución y los usos propuestos en cada zona, de acuerdo con el ICAS. El contrato incluye la redacción del proyecto básico y el de ejecución.

La intención del gobierno de Antonio Muñoz es que el Espacio Santa Clara acoja el museo de la ciudad , con una propuesta digital, visual e interactiva, que también sea la sede de la colección arqueológica municipal , actualmente arrumbada en el Garaje Laverán. Otra propuesta de uso para el antiguo convento es que sea sede formativa de las universidades de la ciudad, en especial para aquellas disciplinas que incidan en la cultura y en el patrimonio. También, sede de la cátedra de Economía de la Cultura y de encuentros, festivales y congresos relacionados con las disciplinas artísticas.

Para que esto suceda, antes es necesario que se intervenga en todo el espacio clausurado. Así, entre este año 2022, 2023 y 2024, se pretende que se ejecute la instalación para la puesta en funcionamiento de la alberca -junto a la torre de Don Fadrique-, la rehabilitación de las edificaciones situadas al norte del compás y la portada de la calle Santa Clara, la reparación del forjado del claustro oeste , la rehabilitación del sector sur y el compás y la restauración de la Sala de Profundis y Sepulcro y las las viviendas de vida particular y los huertos. En total, en estos años se prevé una inversión de 5.749.500 euros, que se pretende que se realice a través de recursos de la Unión Europea, como ha ocurrido con la Fábrica de Artillería.

El convento de Santa Clara está contemplado en el Plan Director del Patrimonio Histórico Municipal -aún no aprobado- como la sede de los Espacios Museísticos Municipales de Sevilla (EMMS) , una red de 30 edificios interconectados a través de un programa expositivo como el gran museo de la ciudad. Allí, en el viejo monasterio de las franciscanas clarisas, estaría la matriz. Por ello, se pretende que, una vez reabra al culto la iglesia de Santa Clara en 2023 y se recupere el acceso principal, se coloque un control de acceso y venta de tiques en el compás, en la conocida ‘casa del Portero’. En la parte alta habrá exposiciones temporales y se sugiere también la idea de un centro de interpretación del conjunto.

Todo el sector sur-oeste -hoy en ruinas- está también definido. Habrá un bar-restaurante y se expondría la colección arqueológica municipal. Asimismo, se instalará la tienda, aseos, un acceso por la puerta Reglar, zonas expositivas , un núcleo de comunicación vertical a través de la nave refectorio, laboratorios y área de investigación, almacenes y se recuperará también el antiguo claustro de las novicias. En la planta alta, donde continuaría el restaurante y la colección arqueológica, habría aulas y seminarios, biblioteca junto al laboratorio de investigación y más zonas expositivas. La sala De Profundis, junto al sepulcro del obispo Silves , será una zona eminentemente para acoger muestras artísticas. Sólo quedaría ya una pequeña parte clausurada que se restauraría a continuación.