Los 7.000 euros que llevaron hasta el asesino de Virginia, la mujer arrojada al Guadalquivir

A través de un comunicado, la Policía daba por cerrado el caso policialmente e informaba de manera oficial de la identidad del cadáver. Las pruebas forenses habían corroborado que se trataba de Virginia, vecina de Sevilla aunque de procedencia boliviana como su expareja y asesino. El Grupo de Homicidios lo tuvo claro desde el martes porque fue él quien les indicó a los agentes donde había ocultado el cuerpo.

La instrucción de este crimen machista, el primero de Sevilla en 2022, la dirige el juzgado nº3 de Violencia sobre la Mujer, el mismo órgano judicial que condenó en 2020 a Alfredo G. C. por haber golpeado a la víctima. Le impuso 40 días de trabajo en beneficio a la comunidad y 16 meses de alejamiento así como la prohibición a comunicarse con ella por un delito de lesiones en el ámbito familiar . Una pena que ya cumplió, según confirmó la oficina de comunicación del TSJA.

Como viene informando ABC, el crimen ocurrió el pasado 25 de abril, aunque la desaparición de Virginia no se denunció hasta el 4 de mayo. Fue una hermana de la víctima la que recurrió a la Policía. El Grupo de Homicidios decidió encapsular el caso por completo hasta el punto de que no trascendió ni siquiera la desaparición de la mujer a los medios.

El perfil de ella era de altísimo riesgo y desde el primer momento se temió que pudieran haber acabado con su vida. Constaba en el sistema de seguimiento de víctimas de violencia machista VioGén con dos perfiles: uno inactivo con respecto a Alfredo G. C. y un segundo, activo en relación a otra pareja a la que también había denunció por malos tratos. Según han confirmado fuentes policiales, el seguimiento de Virginia estaba en manos de la Policía Local de Sevilla que a través de un protocolo de colaboración con la Policía Nacional se reparten los casos. A pesar de estar dentro del sistema de protección , éste ha fallado como muestra el fatal desenlace.

Las sospechas se centraron prácticamente desde el primer momento en Alfredo porque tras la desaparición de Virginia le había sacado 7.000 euros de su cuenta. Un detalle de las pesquisas que ha podido conocer ABC y que ha sido determinante para que los agentes acabaran cercando a la expareja de la víctima. Los agentes acudieron el martes por la mañana a su casa, la misma que compartía con la víctima y otras personas en la calle Ágata del distrito Macarena , y allí lo arrestaron. Durante el interrogatorio, consiguieron arrancarle una confesión. Les dijo a los policías que la había matado porque ella no quería volver a tener una relación sentimental con él. Además de ese testimonio , la Policía logró que el detenido les indicara dónde había tirado el cadáver .

Poco antes de las dos de la tarde, los bomberos localizaban el cuerpo de Virginia metido en unos sacos entre unas cañas que hay en la orilla del río Guadalquivir, en el tramo del río que discurre cerca de las antiguas naves de Renfe de San Jerónimo y junto a un paseo peatonal muy transitado . Así, los condujo hasta el tramo del río que discurre cerca de las antiguas naves de Renfe de San Jerónimo y junto a un paseo peatonal muy transitado. Entre maleza y juncos y sin que llegara a tocar el agua, los bomberos localizaron el cuerpo de Virginia envuelto en sacos.

Se espera que entre este jueves y el viernes pasen a disposición judicial los tres detenidos, que se encuentran en los calabozos de la comisaría de Blas Infante.