José Luis Sanz exige al alcalde de Sevilla que antes de pedir la capitalidad reclame a Pedro Sánchez el metro

Así ha reaccionado el candidato popular tras el anuncio de Antonio Muñoz de que esta semana va a reunir, por primera vez, la 'mesa por la singularidad', con la ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, y el consejero de Presidencia de la Junta, Antonio Sanz, con la que pretende avanzar para la ley de capitalidad que viene reclamando para Sevilla.

Para Sanz, la petición de la ley capitalidad es «una excusa ante el desprecio de ayer (en el mitin de precampaña del PSOE) de Sánchez a Sevilla. Esta ley no nos va a traer todas las infraestructuras pendientes que el Estado nos debe a Sevilla».

«Parece más una huida hacia adelante ante el fracaso del 'alcalde reivindicativo' que prometió en su discurso de investidura», ha destacado Sanz, que ha advertido de que «los sevillanos se están empezando a dar cuenta de que Muñoz promete, se hace las fotos y se olvida de lo prometido con más proyectos que son solo venta de humo».

El candidato del PP a la Alcaldía ha detallado que «Muñoz tiene la habilidad de crear humo informativo ante sus fracasos. Pero los engaños tienen las patas muy cortas y los sevillanos ya están hartos de que no se lo tomen en serio».

En este sentido, ha recordado que la ley de capitalidad es una reivindicación «histórica» del PP, que desde el año 2007 viene solicitando lo que a Sevilla le corresponde, y se ha alegrado del giro del PSOE «tras haberla bloqueado durante 40 años en la Junta de Andalucía y no haber puesto ningún interés durante estos últimos años de gobierno de Espadas y Muñoz».

Sanz ha concluido que la decisión de Muñoz de dar la batalla por el reconocimiento de la capitalidad de Sevilla, más allá del Estatuto de Andalucía, «huele a estrategia electoral». Por último, ha destacado que «en el PP siempre hemos apostado por una ley que no discrimine al resto de capitales de provincia de Andalucía, pero que reconozca a Sevilla como capital e incluya financiación para ejercer las competencias, así como un mínimo de inversiones en infraestructuras».