Así se fabricaba el aceite adulterado que se vendía fraudulentamente como oliva virgen extra

La operación del Seprona se activó tras la declaración de la alerta sanitaria emitida por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) después de tener conocimiento de que empresas dedicadas al envasado y distribución de aceites estarían comercializando de manera irregular aceite de oliva con deficiencias e irregularidades en su etiquetado, careciendo de registro sanitario y, por tanto, fuera de control oficial en su trazabilidad en Extremadura.

De los análisis realizados por el laboratorio de referencia en dicha comunidad se pudo saber que el producto, que se vendía envasado en garrafas de cinco litros y etiquetado como aceite de oliva virgen extra, era mezclas de aceite vegetal (semillas oleaginosas) con aceites de oliva refinados (orujo de oliva), conocidas más comúnmente en el sector alimentario como aceite «lampante», un producto no apto para el consumo humano. Según detalla la Guardia Civil, este líquido se caracteriza por ser de «muy mala calidad».

El Real Decreto 760/2021, de 31 de agosto, por el que se aprueba la norma de calidad de los aceites de oliva y de orujo de oliva, prohíbe explícitamente en su artículo ocho la elaboración de mezclas de aceites de oliva y de orujo de oliva con otros aceites o grasas de origen vegetal. Esta circunstancia no se reflejaba en los informes de los análisis realizados a las muestras de aceite intervenidas, que determinó la presencia de aceites de semilla no compatible con la aceituna.

Un informe resultante de los análisis efectuados a las muestras de aceite adulterado intervenido por la Guardia Civil y al que ha tenido acceso este periódico concluye que el producto es una mezcla de aceites refinados de oliva (orujo) y aceites vegetales indeterminados (el que se conoce como «lampante» por su mala calidad).

Otro muestra analizada por el Laboratorio Agroalimentario de Cáceres arrojó niveles de ácido oléico y ácido linoléico que llevaban a concluir que se trata de aceite de mezclas de aceite de oliva y aceites vegetales.

La normativa europea establece que el aceite de oliva se compone exclusivamente por aceites de oliva refinados y aceites de oliva vírgenes, cuyas características se establecen en el Reglamento número 2.568/91 de la Comisión, de 11 de julio de 1991.

Además, el etiquetado de estas garrafas intervenidas carecía de información real de la composición del producto ofertado, así como registro sanitario por algunos operadores comerciales partícipes en la producción, envasado y distribución del mismo, que evidenciaban graves defectos de trazabilidad en aras a eludir su verdadero origen.