Continúa el periplo de la silla de ruedas de la sevillana Virginia Lozano: está en Disneyland

Tal y como trasladó a ABC de Sevilla, el pasado 22 de octubre, cuando iba de viaje en avión de Sevilla a París, para conocer DisneyLand y aunque «este viaje lo llevaba organizando cerca de 2 años y se supone que iba a ser mágico, resultó ser una auténtica pesadilla». Al llegar al aeropuerto de Orly, en la capital francesa, la silla eléctrica, valorada en 3500, no apareció y nadie se responsabilizaba de la pérdida.

Virginia, su familia y todos los allegados comenzaron a movilizarse en redes sociales y medios de comunicación para dar con la silla de ruedas y que se depuraran responsabilidades del incidente. Una semana después, a través del programa 'Andalucía directo' de Canal Sur, hemos conocido el siguiente capítulo del calvario de esta familia sevillana para recuperar lo que es suyo.

Al parecer, la silla de Virginia ha aparecido, pero no en Sevilla. Está en Disneyland Paris. Tal y como relata la afectada: «La compañía que tenía que haber llevado mi silla a mi casa, en Sevilla, en lugar de llevarla a mi domicilio la ha mandado a Disneyland París, al hotel en el que me alojé, y el hotel la ha enviado a objetos perdidos de Disneyland París».

El asunto de la pérdida no hace más que volverse más farragoso. Según cuenta la sevillana, la compañía le envió un email diciendo que estaban felices de haber entregado la silla de ruedas a su destino, el cual no es, y que la pérdida vino dada porque el día que Virginia viajó a Francia, tenían mucho volumen de equipaje y esta fue tratada de la misma manera que una maleta. Por ello no llegó al hotel a su fecha. Le prometieron que llegaría en 24 o 48 horas para que pudiera hacer uso de ella durante su viaje en el parque temático.

Así las cosas, la joven y su familia siguen esperando, desesperados y desorientados. La silla está localizada, pero Disneyland París no se hace responsable de los gastos que supone enviarla a Sevilla, al domicilio de Virginia, y desde Transavia tampoco le dan solución. En el siguiente intento, se han puesto en contacto con una asociación de consumidores, y esperan su respuesta y asesoramiento.