Así han cambiado las notas de corte en Sevilla con el cambio de formato de Selectividad

Se trata de una barrera provisional, puesto que la nota de corte la establece la última persona solicitante que es admitida en cada titulación y centro, y depende del número de plazas ofertadas, el de solicitantes y las calificaciones obtenidas. Es, por tanto, un número voluble que se mueve en función de varios factores diferentes y que, además, debe bajar aún más al quedar por delante otras adjudicaciones. Sin embargo, comparar las notas de corte de la primera adjudicación de 2025 con las del año pasado sirve para hacerse una idea del movimiento generalizado a la baja de todas ellas.

Sirva como prueba de este mencionado descenso que coincide con la implantación del nuevo modelo de exámenes de Selectividad, que no es radical pero sí palpable, un botón: sólo ocho de las titulaciones que pueden estudiarse en Sevilla exigen más de un 13 para poder inscribirse, cuando el año pasado eran nada menos que diecisiete, algo más del doble. Es decir, podría decirse que, a priori, las titulaciones más altas han rebajado la exigencia.

Siete de las estos estudios con notas de corte más elevadas se pueden estudiar en la Universidad de Sevilla. En la cúspide de la pirámide se sitúa un año más el doble grado de Física y Matemáticas, con sólo veinte plazas disponibles, que se ha quedado en un 13,750, prácticamente un calco de la puntuación que tenía en 2024 tras la primera adjudicación, solo 15 milésimas por debajo.

Otros dobles grados que se sitúan ligeramente por detrás también han bajado un poco la nota, aunque también de forma casi testimonial, como el de Ingeniería Informática, Tecnología Informática y Matemáticas, que ha pasado de un 13,615 a un 13,450; Fisioterapia y Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, que cae muy levemente de un 13,420 a un 13,368; o Matemáticas y Estadística, de un 13,164 a un 13,098.

Lo mismo ha sucedido con los grados que se ubican en estas posiciones más altas, algunos de los cuales venían de subidas el año pasado para volver a descender este año. Es el caso de Medicina, que ha bajado de un 13,520 a un 13,386; o Ingeniería Aerospacial (PARS con máster en Ingeniería Aeronáutica), de un 13,380 a un 13,300. En cambio, Odontología experimenta la misma variación pero a la inversa: de un 13,278 a un 13,320. Como se puede comprobar, la práctica totalidad de estas titulaciones con notas de corte más altas son de la rama científica.

Lo cierto es que las más damnificadas son las titulaciones de letras, dos de cuyos dobles grados con mayor demanda y menor oferta llegaron a colarse en 2024 en el selecto grupo de los 13 de nota de corte y este año han caído. Así ha ocurrido con Educación Infantil y Educación Primaria, que de un 13,072 se ha quedado en un 12,; y Filología Clásica y Filología Hispánica, que ha bajado de un 13,025 a un 12,074, todo un punto.

En la Pablo de Olavide, por su parte, los únicos estudios que superan la barrera de los 13 puntos en esta ocasión son el doble grado de de Relaciones Internacionales y Derecho, con muy pocas plazas y un 13,396, cuando en 2024 llegó a situarse en 13,602.

Además, el año pasado había hasta seis titulaciones en esas cifras, si bien la mayoría correspondían a dobles grados con muy pocas plazas disponibles, en torno a la decena o veintena. Al contrario que en la Hispalense, en este centro destacan más entre las más demandadas las titulaciones de la rama de las ciencias sociales.

Cabe recordar que los estudiantes que hayan participado en la convocatoria y aprobado tienen de plazo para matricularse o reservar plaza hasta el próximo miércoles 9 de julio. Quienes se hayan quedado a las puertas de acceder a los estudios que desean deberán esperar a la segunda adjudicación, el próximo jueves 17 de julio, para que las notas de corte desciendan más y puedan entrar en su titulación esperada, pese a que las notas este año ya sean por lo general más modestas que el año pasado.