Una persona estafada, una deuda pendiente y la sorprendente reacción de la 'acusada'

Lola ha narrado una historia en la que ambas protagonizaban una bonita relación, una amistad aparentemente fuerte, hasta que Raquel le pidió dinero porque necesitaba una ayuda para afrontar la fianza de alquiler de un piso. «Le dejé 450 euros y no los he visto y se hace la loca, lo niega todo», le explicaba al presentador.

Ha pasado un tiempo y Lola, cansada de las negativas de su ex amiga y tras ver cómo esta la bloqueaba de todas las redes sociales e incluso del teléfono se ha visto «en la necesidad de venir aquí, porque de aquí no me va a poder bloquear, ¿sabes?». Y es aquí que Jorge Javier ha dado paso a la otra parte, a Raquel, para conocer su versión de los hechos. La ha presentado, ha empezado con una introducción amable para que esta entrara mejor en el directo y finalmente le ha desvelado el motivo por el que se sentaba en el sofá del que tanto protesta Vázquez: «Lola ha venido para reclamarte una deuda pendiente, que según ella le debes 450 euros y lo niegas, no se lo quieres dar».

La cara de la aludida era un poema. No necesitaba hablar, pero vaya si lo ha hecho. Breve, concisa, rotunda: «No, eso es mentira. Yo no le debo nada. A mi no me ha dejado nada». Jorge Javier Vázquez no salía de su asombro, porque seguía negando lo que la invitada que contactó con ellos en busca de ayuda les había dicho, sobre el bloque en redes. «No, no es verdad. Yo no he bloqueado a nadie. Lo que pasa es que he cambiado de teléfono y tengo un número nuevo, nada más, pero yo no la he bloqueado», afirmaba Raquel con gesto serio.

Lola se ha contenido pero era fácil leer en sus labios algunas palabras que ha dedicado a la joven –«¡Qué hija de…!»– y ha añadido que en el pueblo a ella y a su madre las llaman «las morosas». Jorge Javier Vázquez ha querido hacer hincapié en ese aspecto: «¿Y eso? ¿Cómo que os llaman las morosas? Será por algo, ¿no?». Raquel seguía negando todo y ahora incluso diciendo que lo de ese apodo era algo casual, que no tenía que ver con este tema. «Así llamaban a mi madre de hace mucho tiempo, no es de ahora, y también a mi, por ser su hija», ha sentenciado.

Lo más impactante ha venido cuando Lola ha mostrado un Bizum con ese envío de 450 euros. Ahí ya ha sido imposible seguir negando lo evidente y es entonces que Raquel se ha derrumbado, comentando que su ex amiga «lo va a recuperar pero más adelante, ahora no se lo puedo dar». Un 'donde dije digo, digo Diego' en toda regla. Y así ha terminado este cara a cara, aunque no han llegado a verse a la vez en plató. Lola no se resigna a recuperar el dinero y al menos se lleva que «delante de toda España se haya desenmascarado a esta mujer».