Así fue el reencuentro de Erundino con Juanra Bonet en «¿Quién quiere ser millonario?

A continuación, el presentador dio la bienvenida al primero de los tres concursantes que se sentarían junto a él en la velada. Fue nada menos que Erundino Alonso, uno de los recordados miembros de «Los Lobos» de «¡Boom!» , equipo que el pasado 8 de julio se llevó el bote del programa de las bombas, valorado en 6.689.700 euros y que todavía hoy es el mayor premio de la historia de la televisión, de acuerdo con el Libro Guinness de los Récords.

«Vaya, vaya. Otra vez por aquí...», le dijo Bonet, para darle la bienvenida. Juntos compartieron 505 tardes en «¡Boom!», por lo que su relación era de lo más distendida. «¡"Boom" es grandioso!», dijo Erundino. «Lo dices por el presentador, ¿no?», bromeó Bonet. «Bueno, eso también. Es de lo mejor que hay», contestó el ingeniero de montes en «¿Quién quiere ser millonario?».

Entretanto, Bonet le comentó a Erundino (y al público) las novedades y la dinámica de esta edición. El premio máximo será de un millón de euros, aunque para alcanzarlo el aspirante central tendrá que acertar quince preguntas. Para ello, contará con tres comodines: dos de ellos tradicionales en el concurso (el del público y el del 50%) y otro que cambia. Hasta ahora y en las anteriores entregas del formato, al concursante se le permitía llamar por teléfono a quien quisiera si dudaba en una pregunta con el «comodín de la llamada», que ahora cambia por el «comodín del familiar», con el que el participante puede contar con la ayuda de alguna persona de su círculo, que debe estar presente en plató.

En ese sentido, otra de las grandes novedades reside en el «segundo seguro» , condición con la que el concursante podrá asegurarse una parte mínima de su premio y a la que puede optar después de llegar al «primer seguro», que se desbloquea al acertar la quinta pregunta y llegar a los 1.500 euros de premio. Cuando esto sucede, el aspirante debe escoger la pregunta en la que desea establecer el «segundo seguro», que le pemitirá irse a casa con la cantidad que haya marcada en él a pesar de fallos posteriores. Es decir, que si el aspirante decide establecer este segundo seguro en la octava pregunta y consigue llegar a ella y acertarla, se irá a su casa, como mínimo, con la cantidad que aparezca en ella marcada, a pesar de marrar después... y no con los 1.500 euros del primer seguro. Explicado así es un poco lioso, aunque en realidad lo es menos de lo que parece.

Cuando acertó su quinta pregunta, Erundino, que acudió al programa acompañado de su primo, Nacho (que también había participado en «¿Quién quiere ser millonario?») decidió establecer el «segundo seguro» en la novena, que acertó y superó, dejando en 15.000 la cantidad con la que se iría a casa sí o sí. Tras ello, continuó jugando y se hizo con 50.000 euros, aunque se plantó a tres preguntas del final , cuando Bonet le preguntó por el vicepresidente del gobierno cuando se inauguró el AVE de Madrid a Sevilla en la pregunta de los 100.000 euros. «Fue en 1992. Estoy entre Narcís Serra y Alfonso Guerra, pero prefiero plantarme ahora a perder 35.000 pavos», aseveró. La respuesta correcta era Narcís Serra.

Así, el «lobo» se volvió a su casa con 50.000 euros , antes de dar paso a la segunda concursante de la noche: Ruth de Andrés, conocida por su paso en «Saber y ganar». La mujer llegó acompañada de su «novio-marido», Rafa, que lo cierto es que no le fue de mucha ayuda.

Cuando llegó a la undécima pregunta, a la concursante solo le quedaba el «comodín del familiar», que utilizó para tratar de descubrir el título del primer disco de Maluma . Las opciones eran «F.A.M.E.», «Pretty Boy», «Dirty Boy» y «Magia», aunque Ruth y Rafa decidieron plantarse y se volvieron a su casa con 30.000 euros.

La tercera y última aspirante de la velada fue la actriz de teatro Laura Zulueta, exconcursante de «¡Boom!» , formato en el que estuvo durante 41 programas como parte de «Las Beatleillas», uno de los equipos más clásicos de la historia del concurso. Su inteligencia le hizo ser requerida por la cadena para participar en «¿Quién quiere ser millonario?», donde llegó acompañada por su hija Sara.

Poco a poco, Laura fue superando preguntas hasta que llegó a la novena. «¿Cuál fue el primer personaje de dibujos animados creado por Walt Disney en 1927?», preguntó Bonet. La aspirante no lo tenía claro y recurrió a la ayuda de Sara. «Yo creo que es Mickey Mouse», decía la joven. «Yo no lo tengo claro. Me parece más bien que fue el Conejo Oswald», afirmaba por su parte Laur a.

Entre las dos no se ponían de acuerdo y por tanto, Laura decidió plantarse. «Prefiero irnos a casa con 15.000 euros a hacerte caso, apostar por Mickey, fallar y tener que desheredarte », bromeó con su hija, antes de volverse a su domicilio con dos millones y medio de las antiguas pesetas en el maletero . La respuesta correcta, por cierto, era la del Conejo Oswald.