Ángeles
Los que dan la tabarra con las series pero nunca apreciaron una de Aaron Spelling no saben lo que es la felicidad delante de la tele
Tanya Roberts , ahora me he muerto, ahora no , ha sido chica Bond y ángel de Charlie. Eso es más currículo que una licenciatura en Harvard y un doctorado en Princeton. Pero ni era de las más conocidas chicas Bond ni de las más conocidas ángeles de Charlie ... . Sólo hizo 16 capítulos. Aunque lo del número es engañoso. La que primero murió de ese universo fue Farrah Fawcett . El ángel más reconocible. La más guapa, la que hizo famosos los trajes de baño rojos antes que las más tetudas vigilantes de la playa. Pero sólo estuvo los 29 episodios de la primera temporada en la serie de Aaron Spelling (Aaron Spelling se hace pipí en la mayoría de productores ejecutivos , creadores o como se llamen ahora, quizá con la excepción de Dick Wolf). Farrah era demasiado estrella para quedarse en la serie en aquellos tiempos. Juro que yo iba al cine a ver sus películas, por ejemplo, «Saturno 3», de Stanley Donen, con Kirk Douglas y Harvey Keitel (Kirk Douglas enseñaba en el espacio su culo prieto de 64 años).
Cuando Farrah se fue de farra la sustituyó Cheryl Ladd , que tenía ese apellido porque estaba casada con un hijo de Alan Ladd. Ella debía de ser de la misma altura que su suegro. Su personaje era una hermana pequeña de Jill Munroe, Kris Munroe. Acabó haciendo 87 episodios en una serie que duró de 1976 a 1981. La campeona es la inmarcesible Jacklyn Smith , que estuvo 110 capítulos haciendo de Kelly Garrett, los mismos que David Doyle (John Bosley), el enlace entre las chicas y Charlie, cuya voz original al teléfono era la de John Forsythe, pero entonces no sabíamos de esas cosas. Aquí era Federico Guillén, que también hacía la narración inicial de «El equipo A». Kate Jackson , como Sabrina, estuvo 69 capítulos y Shelley Hack (Tiffany Welles), 25. A esta siempre la imagino anunciando el perfume Charlie.
Los que dan tanto la tabarra con las series, pero nunca apreciaron una de Aaron Spelling no saben lo que es la felicidad delante de una tele. Sí, la de Martin Tupper de pequeño en «Sigue Soñando». La felicidad de ver «Los ángeles de Charlie» los sábados por la tarde. Pero sin Tanya Roberts .
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