Estados Unidos
Estrellas demasiado bien pagadas
Anderson Cooper y Jon Stewart salen caros para el éxito que tienen, Ashton Kutcher cobra mucho pero lo vale y Ty Burrell es un chollo
F. M. B.
El guionista William Goldman («Dos hombres y un destino», «Todos los hombres del presidente») explicó mejor que nadie el origen del «star system»: puesto que «nadie sabe nada» , mucho menos por qué triunfan o fracasan las películas, los estudios se agarran ... a las estrellas y les pagan cantidades increíbles con la esperanza de que sean ellas quienes atraigan al público. Cuando la teoría no funciona, algo que ocurre a menudo, se cambia de cromos; nunca de planteamiento.
El diario «Los Ángeles Times» se ha entretenido en calcular la rentabilidad de los mejor pagados de la tele y desmontar el «star system» catódico por el método de dividir su sueldo (a veces una estimación) entre el número de espectadores que ven sus programas, con resultados a menudo sorprendentes. Entre los más sobrevalorados económicamente, o «sobrepagados», destacan el presentador de la CNN Anderson Cooper , el azote de los republicanos Jon Stewart y la actriz y presentadora Ellen DeGeneres . La peor, sin embargo, es Chelsea Handler , quien cobra 12 millones de dólares en el canal de entretenimiento E! y no la ve «ni el Tato». O casi.
Ashton Kutcher , en el lado contrario, podría estar incluso infravalorado, pese a los 17 millones que cobra, y que justifica sobradamente (los guionistas pensarán otra cosa sobre el reparto de méritos) como sustituto de Charlie Sheen en «Dos hombres y medio». Ted Danson , por su parte, es calificado como auténtica «ganga» por lo que cobra en la serie de investigadores forenses «CSI», sin contar los crímenes que resuelve. Jennifer López también puede presumir de dar más de lo que recibe en «American Idol», aunque a cambio ha recobrado algo de popularidad y podrá relanzar su alicaída carrera. Pero quien sin duda es el chollo del siglo es Ty Burrell , genial padre tontorrón de «Modern Family», que cobra 8 céntimos de dólar por espectador. Este hombre necesita un agente.
La conclusión final, nada sorprendente, es que los sueldos que cobran las estrellas no tienen ni pies ni cabeza y están puestos por métodos poco racionales, por decirlo de una manera suave. Por otro lado, hay que tener en cuenta que presentadores como Jon Stewart o David Letterman pueden cobrar mucho, pero llegan a hacer más de doscientos programas al año, mientras que un actor de una serie rueda como mucho veinte capítulos, que a menudo no duran ni treinta minutos. Otra cosa son las tomas falsas.
Si hiciéramos el mismo ejercicio en España, ¿cuál sería la estrella que peor justifica su sueldo?
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