Los concesionarios cierran 2022 con márgenes del 2,1%, los mayores en 10 años
Los vendedores consiguieron mantener su facturación en línea con 2021, hasta los 36.137 millones
Las patronales dan por perdido 2023 y ven retos para el futuro Gobierno
Un concesionario Audi en Múnich
«Que los fabricantes obtengan beneficios récord es una gran noticia», afirmó el presidente de la federación de concesionarios oficiales (Faconauto), Gerardo Pérez, al presentar el balance comercial del ejercicio 2022 para la distribución de vehículos.
«Las crisis han hecho que las políticas ... de ventas sean mucho más racionales, igual que la gestión de los inventarios», declaró el ejecutivo, que dejará su cargo en junio. Antes de la pandemia, el volumen dictaba las operaciones de un concesionario, con mayores descuentos, menores márgenes y una presión enorme para llegar a los objetivos de unidades fijados por los fabricantes.
Ahora, tener menos disponibilidad de vehículos ha hecho que estos factores prácticamente se inviertan y los concesionarios han registrado una rentabilidad media del 2,1%, la mayor de los últimos 10 años. Esto, además, también supuso la protección de los puestos de trabajo, que saldaron el ejercicio con 153.747 efectivos, 1.500 más que en 2021.
Según la asociación, las concesiones que reforzaron sus plantillas lo hicieron con nuevos perfiles profesionales, «vinculados a procesos digitales, al impulso de nuevas áreas de negocio y al buen momento que atraviesa la posventa».
Sin embargo, recuerdan que en los últimos cinco años, se han perdido 8.000 puestos de trabajo en la distribución, fruto de la concentración de los puntos de venta. Esta tendencia se aceleró con las normas de competencia vertical europeas, que entraron en vigor en 2012 y fueron revisadas en 2022.
Así, a cierre del ejercicio, en España había 2.011 concesionarios oficiales, 700 menos que hace una década. En total, todos registraron una facturación de 36.137 millones de euros, en línea con el año anterior.
El área de negocio que más se resintió fue la de Vehículo de Ocasión, que ingresó 6.203 millones (un 13,4% menos), penalizada por la falta de inventario originada por la escasez de semiconductores. En cambio, Posventa registró cifras un 12,8% mejores, hasta los 5.162 millones de euros.
Vehículo Nuevo sigue siendo la que ocupa el mayor peso en los resultados de un concesionario, y esta se mantuvo estable con respecto al año anterior. Sin embargo, cabe destacar que los coches se encarecieron un 8,6% en comparación con el año anterior, hasta cerrar con una media de 33.750 euros. Desde 2019, el aumento del coste de un vehículo ha sido del 23%.
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Finalmente, Pérez quiso destacar la amenaza que supondría una norma de emisiones más estricta para la industria española. «La norma Euro 7 nos puede dejar en la irrelevancia como país productor y llevarse por delante buena parte del tejido empresarial que representa la distribución. El resultado será el contrario del esperado: se aleja el vehículo privado del ciudadano medio, porque los coches serán más caros, se impide la renovación del parque y se ralentiza la descarbonización», sentenció.
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