El pueblo británico dicta sentencia: ama a Guillermo y odia a Harry

Lo tremendo del Príncipe Guillermo es que ha desbancado en popularidad incluso a su propia mujer, Kate Middleton, quien hasta el pasado año era la indiscutible favorita del pueblo. Seguramente en ello ha tenido que ver su poca exposición pública desde que inició el tratamiento de cáncer. No es que su marido se prodigue mucho, pues es conocido que no le gusta demasiado participar en eventos públicos, pero cada aparición ha sido realmente efectiva en términos de imagen. Al tiempo, se valora cada vez más su espontaneidad y naturalidad.

Según los datos de la encuesta de YouGov, una empresa dedicada a la investigación de mercados y análisis de datos, el Príncipe Guillermo tiene una aceptación de nada más y nada menos que del 74% de sus súbditos. Un cifra que contrasta con los desastrosos resultados del Príncipe Harry, quien se queda en un pírrico 28%.

Es cierto que Kate Middleton ha perdido el primer puesto en los índices de popularidad entre el pueblo británico, pero sigue gozando del amplio favor de sus súbditos. Es segunda tras su marido con un 71% de aprobación entre los encuestados. Y de nuevo un enorme contraste si se comparan con los resultados de su cuñada, Meghan Markle, quien apenas cuenta con un 20% del favor del pueblo británico.

El tercer puesto de la encuesta de YouGov queda para otra de las favoritas perennes de la Familia Real británica, como es la Princesa Ana. Es cierto que es muy discreta en su vida privada, pero ha sido un gran apoyo de la familia en este tiempo en el que el tanto el Rey Carlos como Kate Middleton se han visto obligados a reducir al máximo sus apariciones en eventos de representación de la monarquía debido a sus respectivos tratamientos oncológicos. El 70% de los británicos la adora, según la encuesta.

Según la encuesta, el Rey Carlos tiene una aceptación del 59%, cuatro puntos menos que hace un año, mientras la Reina Camila se queda en un 43%. Esta última cifra es más relevante si se compara con la regostrada en noviembre de 2017, cuando tan solo tenía un 33% de la opinión favorable. Solo superó el 50% en el último trimestre de 2022, cuando murió la Reina Isabel II, alcanzando entonces el 55%.

De lo que no cabe duda es de quiénes son los menos apreciados por los súbditos dentro de la familia. Y sus nombres corresponden a los tres miembros más polémicos y sujetos a controversia. Así, el Príncipe Andrés, tan salpicado por sus continuos escándalos desde que su nombre apareció vinculado a Jeffrey Epstein, acompaña a los duques de Sussex en los tres últimos puestos del ranking de popularidad.

El hermano del Rey Carlos solo tiene la aprobación del 5% de los británicos. O lo que es lo mismo: no lo quiere prácticamente nadie. El 87% manifiesta tener una opinión abiertamente negativa sobre él. Ni que decir tiene que es el peor valorado de los cuatro hijos de Isabel II, para quien curiosamente era su favorito. El Príncipe Eduardo cuenta con un 52% a favor, una cifra similar a la de su esposa, Sofía de Edimburgo, que posee un considerable 50%.