Cómo hacer kombucha en casa por primera vez

Antes de comenzar a jugar con esta bebida fermentada a base de té y azúcar, es esencial hacerse con un 'Scoby' -Symbiotic Culture Of Bacterias and Yeast-, acrónimo del cultivo simbiótico de bacterias y levaduras sanas con forma de disco que se encarga de realizar de esta fermentación.

Las personas que elaboran esta bebida suelen regalarlo, pues se reproduce con gran facilidad, pero también existen páginas, como Lov Ferments, en Barcelona, que venden este hongo y un pequeño curso para aprender a utilizarlo.

Para hacer kombucha solo se necesita el 'Scoby', agua mineral, té verde o negro orgánico en hojas, azúcar y cultivo iniciador -o kombucha madre-.

Para un litro de esta bebida se lleva a hervir un litro de agua con una cucharadita de té y 55 gramos de azúcar.

Cuando llegue a ebullición se apaga el fuego, se deja enfriar por completo, se cuela y se vierte en un bote de cuello ancho junto al cultivo iniciador y al 'Scoby'.

Se tapa con el paño limpio y una goma, dejando que respire en un sitio oscuro y seco.

Es importante que no esté al alcance de la luz directa ni se mueva en ningún momento.

A partir del décimo día se puede empezar a probar con una pajita de plástico al borde del bote y sin molestar al nuevo 'Scoby' que estará creciendo en la superficie, para así decidir en qué momento comenzar a consumirlo.