Sánchez Acera declara que no conserva los wasaps con Lobato

Y por esa vía de la causa es por la que este miércoles han declarado en el Alto Tribunal Sánchez Acera y Lobato. El primero, según publicó en exclusiva ABC, envió al segundo la confesión de González Amador para que la usara en la Asamblea madrileña. El exjefe de los socialistas madrileños fue a depositar los mensajes a una notaría y preguntó a Sánchez Acera de dónde había sacado el mensaje porque tuvo dudas sobre si podía exhibirlo.

Esta mañana, Sánchez Acera ha afirmado ante el tribunal que juzga a García Ortiz por presunta revelación de secretos que no conserva los wasaps intercambiados con Lobato y que el contenido del mail de la defensa de Ayuso le llegó a través de un periodista (de quien no ha revelado el nombre) y, en todo caso, ha asegurado, no se trataba del «famoso correo del 2 de febrero» con los detalles de la conformidad, sino un «pantallazo».

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«¿Recibió un mensaje de Vallés [Francesc Vallés, jefe de la Oficina de Comunicación de Moncloa] para que le dijera a Lobato que estuviera pendiente porque esto iba a ir a más?», ha preguntado el abogado de González Amador, acusación en la causa. «No», ha rechazado Sánchez Acera. «Yo lo que recuerdo es que pudo haber un encuentro en algún pasillo con el señor Vallés y que me dijera que Lobato tenía la oportunidad de estar en los medios, que estuviera en alerta. Era un poco eso», expone Sánchez Acera.

«Si usted me está preguntando si envié el correo del 2 de febrero que es objeto de la investigación, yo nunca lo he recibido. Lo que recibo es una imagen de un documento distinto. Sé que es distinto porque hemos visto en la prensa el correo y en éste hay una persona que envía, un destinatario, una disposición del texto distinto. Y yo no tengo ni quién envía, ni destinatario, y tiene un pie de firma del despacho de abogados que el correo que está siendo objeto de investigación no tiene. Quiero dejar claro que no recibo el famoso correo del 2 de febrero», aclaró la testigo, para apartar la sospecha de la filtración de la esfera de Moncloa. En este sentido, insistió en su papel de secretaria de política institicional del PSOE de Madrid y, por lo tanto, «subordinada» de Lobato. Posteriormente, fue nombrada asesora de Óscar López en el Ministerio de Transformación Digital.

«¿Pretendía usted que el señor Lobato hiciera un uso político de la imagen del correo?», ha insistido el abogado de González Amador. «Yo lo que espero es que el señor Lobato, en la pregunta a la presidenta de la Comunidad de Madrid, se le pueda decir claramente que estaba retorciendo la realidad en la comparecencia que hizo después del consejo de Gobierno. Ella dijo algo parecido a que este asunto era una persecución. Es en lo que ella estaba centrando este asunto. Lo que fuimos evidenciando el 13 y 14 en la Comunidad de Madrid es que la presidenta estaba retorciendo la realidad y él tenía la obligación, en la Asamblea de Madrid, de decírselo a ella», ha contestado Sánchez Acera.

Sánchez Acera ha afirmado que la imagen (del correo en cuestión) «me llega de un medio de comunicación, de un periodista. No puedo recordar quién es el periodista que me lo envía» y «en ocho meses, hasta que Lobato me dijo que ha ido hasta un notario, me olvidé del asunto y cambié de móvil al cambiar de puesto de la presidencia al Ministerio», ha afirmado para justificar por qué no conserva el mensaje del periodista que afirma le envió la imagen del acuerdo de la conformidad de González Amador.

«Le digo ten cuidado con los datos personales (a Lobato) porque aparece el teléfono profesional de una persona, pero a mí no me parece una cosa que sea de buen gusto que se vea el teléfono de cualquier despacho o de cualquier persona publicado», ha seguido Sánchez Acera. «¿Por qué no cortó de raíz el uso político de esa imagen que evidentemente tiene una afectación legal?», ha inquirido el representante de la pareja de Ayuso. «El dato personal al que usted me hace referencia no es personal, es profesional. Yo se lo paso a mi superior jerárquico, al líder de mi organización que considero que puede tener un interés porque está en la actualidad este asunto. El contenido del documento que yo le paso ya estaba en los medios difundido», ha respondido ella.

«Por lo que se ha visto luego, la noticia de Elplural.es, porque lo ha llevado Lobato a un notario y porque lo ha publicado ABC, es público, la noticia sale publicada a las 9.07. Seguramente el señor Lobato ya lo habría recibido por más medios. Como soy secretaria de política institicional del PSOE de Madrid, le digo puedes decir esta frase. Es absolutamente entendible en la relación de confianza que teníamos Juan y yo. No creo que él lo imprimiera, se lo imprimiría alguien y lo exhibiera a raíz de que yo se lo hubiera enviado», ha justificado.

«Ese pantallazo que es de un documento distinto al correo, lo debo recibir un poco antes de enviárselo al señor Lobato», ha insistido Sánchez Acera. «¿Hace alguna indagación de la autenticidad de esa fuente?», ha preguntado el representante de la acusación de la Abogacía de Madrid, también acusación de la causa. Sánchez Acera ha contestado que no.

La acusación Foro Libertad y Alternativa pregunta si dijo al señor Lobato quién le envió la imagen, algo que le preguntó reiteradas veces el exlíder de los socialistas madrileños, según los wasaps que él sí entregó. «¿Le aclara de dónde viene?», ha insistido el abogado Fernando García Capelo. «No, tampoco me hace la pregunta» ha contestado. «Lobato me dice: ¿cómo la tenemos? De hecho, ocho meses después, me dice: me dijiste que te la enviaron los medios. Y le contesto: si fue lo que te dije, es lo que es, Juan», ha sostenido Sánchez Acera.

«¿No le sorprendió que un periodista le diera a usted una información tan relevante antes de publicarla?», ha preguntado el abogado de la acusación Manos Limpias, Víctor Soriano. «Yo creo que ya estaba publicado, pero no lo pensé», ha contestado Sánchez Acera.

Posteriormente, el fiscal Francisco José Montero Juanes ha pedido pide que se exhiba ante la Sala el correo de conformidad del día 2 de febrero y la imagen que Sánchez Acera afirma que remitió a Lobato por medio de whatsapp, para ver las diferencias. «¿Compartió con alguien más que con el señor Lobato ese archivo? ¿Conoce a alguien de la Fiscalía General del Estado?», ha preguntado el fiscal. La testigo ha contestado con dos negaciones seguidas.

Al exhibirle el correo con los datos reservados de la defensa de González Amador objeto de la causa, por si fue filtrado por el fiscal general del Estado, Sánchez Acera ha negado que recibiera precisamente ese correo, como previamente había dicho.