Francia condena a siete años de cárcel a Josu Ternera

Los magistrados parisinos han prohibido la entrada en territorio francés del que fuera el principal jefe político de la banda terrorista hasta el proceso de paz abortado en 2006.

Los cargos contra José Antonio Urrutikoetxea y su hijo Egoitz -condenado a cuatro años en primera instancia, sobre la que no ha habido apelación- se fundaban en las pruebas encontradas en 2002 en apartamentos de ETA en Lourdes y Villeneuve-sur-Lot, en el suroeste de Francia, y en un vehículo.

Estos elementos han sido bastado al ministerio público para argumentar que ambos pertenecían a ETA y eran por tanto culpables de «asociación de malhechores con fines terroristas».

No es la primera vez que Josu Ternera ha sido condenado en Francia. Detenido en Bayona en 1989, con una granada de mano y documentación falsa, fue condenado a diez años de prisión. Fue expulsado a España tras su puesta en libertad en 1996.

Elegido en 1998 diputado del Parlamento vasco, fue designado en 1999 como uno de los tres interlocutores de ETA para negociar con el Gobierno español. Desaparecido en 2002, cuando el Supremo español emitió una orden de detención para que respondiera sobre su implicación en un atentado cometido en 1987 contra un cuartel de la guardia civil en Zaragoza que causó 11 muertos, cinco de ellos niños.

Considerado como favorable al diálogo y próximo a Arnaldo Otegi, Josu Ternera fue apartado de las negociaciones con el Gobierno a finales de 2006 por terroristas más radicales. Si se confirmara la vuelta de Ternera a la cúpula de ETA , que se habría producido esta semana, supondría un cambio para las futuras decisiones de la banda terrorista. ETA anunció el 5 de septiembre que suspendía las «acciones ofensivas armadas», sin precisar si de forma temporal o definitiva. El Gobierno ha juzgado el anuncio insuficiente y ha reclamado el abandono definitivo y sin condiciones de la violencia.