Los bandazos del PSOE andaluz con el impuesto de sucesiones

En un nuevo giro de guion, la federación andaluza del PSOE, ahora regida por Juan Espadas , propone que la Junta devuelva al Estado la gestión del tributo que grava las herencias y donaciones y el impuesto sobre el patrimonio, cedidos a la comunidad autónoma en 2009, o bien que «sean armonizados» entre las distintas regiones. Es decir, plantea que Andalucía pierda la competencia autonómica de recaudar estos impuestos que figuran en el sistema de financiación. Con la llegada del PP y Cs a la Junta, el impuesto se rebajó en un 99% para familiares directos (hijos, padres y cónyuges).

La propuesta aparece en una ponencia marco que debatirán los socialistas andaluces en el XIV Congreso del partido que se celebrará los próximos 6 y 7 de noviembre en Torremolinos. Curiosamente, en dicho documento, publicado en el portal del PSOE-A, la formación defiende «la autonomía fiscal» pero al mismo tiempo propugna arrebatarle esta competencia a la Junta. Lo justifica por su rechazo radical al llamado 'dumping' fiscal (competencia desleal) «que provocan algunas comunidades de alta renta per cápita y capacidad recaudatoria que conducen a mayores desigualdades entre las comunidades».

Por esta razón, el PSOE-A propone que se «replantee» la cesta de tributos cedidos a las autonomías , «al menos en lo que se refiere a competencias normativas» y, en concreto, a los impuesto de sucesiones y donaciones y sobre patrimonio. «Defendemos que los tributos cuyo contribuyente puede desplazarse en el territorio para aprovecharse de las ventajas fiscales de alguna comunidad autónoma o bien sean armonizados o directamente recuperadas todas las competencias normativas por parte del Estado», afirma.

En la ponencia, los socialistas lanzan otro misil a la línea de flotación de la agenda de Juanma Moreno , que ha convertido la bajada de impuestos en una seña de identidad de su gobierno. Rechazan «las proclamas neoliberales que, bajo la falsa promesa de reducir todos los impuestos, terminan siempre reduciendo tan sólo los que recaen sobre las rentas o patrimonios más elevados», recoge el documento.

Tal aseveración contrasta con la decisión del Ejecutivo socialista de librar de tributar por herencias valoradas hasta en un millón de euros en el año 2018, cuando la entonces presidenta y líder del PSOE-A, Susana Díaz, llamaba «millonarios» a estos contribuyentes. Lo que le hizo cambiar de opinión fue que Cs, su aliado parlamentario, le puso como condición la rebaja fiscal para aprobarle sus últimos presupuestos.

La exconsejera y hoy ministra de Hacienda, María Jesús Montero , amagó entonces con devolver al Estado la gestión del tributo de sucesiones al Estado cuando gobernaba Mariano Rajoy a cambio de que le ingresara los 400 millones de euros que reportaba a las arcas autonómicas. Pero la ponencia del PSOE-A se ha olvidado hasta de pedir compensación económica. Seguro que nada tiene que ver que el Gobierno central sea de su mismo partido.