Huelga de pescadores en Málaga: «Con estos precios del gasoil no trabajan ni los de las lanchas del hachís»

Los más previsores, como algunos comercios o algunos restaurantes de la zona han hecho acopio sabiendo que va a faltar el producto. Por delante hay mínimo tres días de huelga a la espera de soluciones para unos precios que siguen disparados. «Nos cuesta dinero salir al mar» , dice uno de los patrones que están en Vélez-Málaga sin faenar.

La cofradía de pescadores de este puerto de Málaga se ha embarcado este lunes en autobús para ir a la protesta en Almería , como confirma María Carmilla, patrona mayor. Mientras tanto, la flota, de algo más de un centenar de barcos, está parada. Ninguna de las artes, ni mayores en el arrastre, ni las menores, ha salido a faenar. El acuerdo entre los armadores la han dejado bajo la fina cortina de agua que caía sobre el puerto en los muelles, sin actividad y sin cobrar.

Allí un grupo de marineros está matando las horas muertas con algún patrón que no ha ido a Almería. Desde los muelles de las artes menores explican que a los que más golpea los elevados precios son los barcos grandes de la pesca de arrastre. «Ellos pueden estar echando 3.000 de gasoil a la semana , nosotros vamos con menos, pero paramos todos», explica uno de los marineros.

La jornada está siendo aprovechada para poder arreglar los aperos, acondicionar las redes o revisar los barcos. En algunos, los mecánicos están cambiando aceites, revisando motores y sistemas de seguridad. Los armadores aprovechan el parón para poder a punto los barcos para cuando se pueda volver a la actividad. Esperan que con mejores precios del combustible. «De un día para otro nos sube el litro trece céntimos . No lo pedemos asumir», señala uno de los patrones que está en el puerto en esta primera jornada de huelga.

Los precios del gasoil ponen en jaque la economía de los marineros, que se ven saliendo a pescar sin rentabilidad o parados sin cobrar ese día. «Aunque no cobremos el seguro hay que pagarlo y, si no lo haces, tienes un recargo del 20%» , asevera uno de ellos. Se juegan la vida en las aguas del Mar de Alborán sin sacar un salario mínimo ni digno. »Aquí somos mileuristas, pero muchos meses hemos cobrado 300, 400 ó 500 euros como mucho«, señala otro de los marineros del grupo.

«Con estos precios del gasoil no trabaja nadie; ni los de las lanchas de hachís» , afirma otro de los pescadores, que durante sus jornadas de trabajo en alta mar está acostumbrado a ver las 'narcolanchas' varadas durante días en aguas internacionales o siendo perseguidas por el helicóptero o por los servicios marítimos de Aduana o de la Guardia Civil.

Los marineros son el eslabón más débil de la cadena. Su sueldo sale de un reparto por partes de lo que se captura. No tienen un fijo a percibir cada mes . «Eso aquí son muy pocos los que lo tienen», explica otro, que dice que en su caso, al trabajar en las artes menores, el pescado va a la lonja y con lo que consigue de la venta se pagan los gastos del día . Lo que queda de ese pago se reparte entre el dueño del barco y los marineros. «Los acuerdos varían, pero son todos parecidos», recuerda otro marinero.

Con esta situación límite, las cofradías de Málaga han decidido parar. S e suman así a los transportistas y al malestar de los agricultores . Los camioneros este lunes han sumado una nueva jornada de huelga a la de una bajada del precio del combustible. «Hay una nueva reunión con el Gobierno y esperamos soluciones», asegura Francisco Fernández, de la Federación Andaluza de Transportes, quien señala que este lunes hay muy poca actividad registrada en las carreteras de Andalucía .

En Málaga ha habido una nueva protesta, pese a que pesan los días sin actividad, desde Vélez-Málaga ha salido en caravana provocando tráfico lento para colapsar algunos de los accesos de Málaga capital en señal de protesta. «Han venido camiones de varios lugares no sólo de aquí. Se van a concentrar allí hasta el mediodía», señalaba un agente de Tráfico de la Guardia Civil que estaba controlando el tránsito en una rotonda.

De esta forma, sobre las 9.00 horas de la mañana, los camiones aparecieron por calle Victoria, en el Centro, así como en el polígono Guadalhorce y El Viso. La idea era congestionar el tráfico en esos puntos, para hacer patente su protesta por los precios del combustible a la espera de una solución por parte del Gobierno de España.