'La abadesa', religión y destino con mujeres inconformistas en la alta Edad Media

Julián Elizalde ha estado el frente de la fotografía de la película, uno de los aspectos más elogiados durante la rueda de prensa ofrecida por el equipo en el Cine Albéniz de Málaga, al que han acudido, además del director, las actrices Daniela Brown y Berta Sánchez y el productor, Miguel Morales.

Chavarrías y el equipo de producción se enfrentaron a numerosos desafíos durante las siete semanas de rodaje, incluyendo la dificultad de trabajar con la iluminación natural en un entorno histórico como Loarre y en los meses más duros del invierno. «Fue un rodaje muy duro, pero Julián ha tenido la capacidad de sacar esa belleza», ha destacado Chavarrías, a quien corresponde el guión de la película.

'La abadesa' se centra en la figura de Emma de Barcelona, una religiosa del siglo IX cuya historia apenas está documentada. «Me inspiré en las actividades históricas de Emma, pero tuve que recrear su personaje basándome en literatura de la época y en la imaginación», ha explicado el cineasta, que se adentra en la vida de Emma y otras monjas que, cada una con sus causas e inquietudes, desafían los roles de género impuestos en la sociedad medieval.

El proceso de rodaje también presentó desafíos logísticos, especialmente al enfrentarse a elementos naturales adversos. «Se ve la nieve, pero hay una cosa que no se ve y que era tan dura como ella, el frío. Estábamos en un castillo abandonado que no tenía puertas, no tenía ventanas, en un sitio elevado donde el viento soplaba desde que entrabas hasta que salías», ha comentado Chavarrías, para el que ha sido fundamental la «implicación» de todo el equipo para el éxito del proyecto.

Daniela Brown interpreta a la protagonista, un personaje complejo que arranca como una mujer ingenua, piadosa y sometida a la religión para ir evolucionando durante la trama y rebelarse, sin abandonar nunca la fe, al poder masculino establecido. Brown ha reconocido que fue un desafío adaptarse al lenguaje y la mentalidad de la época.

«Al principio es un impacto porque se aleja mucho de nuestra manera de hablar contemporánea y no quería que sonara artificioso, como de una falsa epicidad», ha indicado la actriz, «lo que hice fue repetir el texto de muchas maneras posibles e intentar encontrar la máxima naturalidad del personaje con este vocabulario, pero es complejo»

El vestuario y la ambientación histórica jugaron un papel crucial en la creación del ambiente de la película. El equipo de diseño de vestuario se esforzó por crear prendas auténticas que reflejaran la época. «El hábito religioso nos ayudó a entrar en el papel de nuestras personajes y a transmitir su fisicalidad», ha subrayado Brown.

Aunque la película aborda temas contemporáneos, como el feminismo y el empoderamiento de las mujeres, Chavarrías ha explicado la palabra «feminismo» no existía en la época, y que lo que él aprecia en la cinta es a un grupo de mujeres que desafían los roles de género establecidos.

«Todas, de alguna forma, están condenadas a un destino que no han elegido», ha apuntado, «a lo largo de la historia ha habido mujeres que se han cuestionado el papel que les han asignado en la vida y siempre ha habido mujeres que se han reaccionado en contra de ese conformismo con el que tenían que actuar, de seguir determinados parámetros simplemente porque son mujeres; eso ha existido siempre».