Francisco Figueroba: «Acometeremos la restauración del Señor del Huerto en este mandato»

-¿En el mandato que ahora se abre cuál será su objetivo prioritario?

-El principal objetivo de los próximos cuatro años es mantener la línea del mandato anterior. Visto lo visto y después de la pandemia que hemos pasado no nos vamos a proponer metas difíciles de conseguir. Se decidirán y trabajarán en el día a día. La idea es continuar con el incremento patrimonial: nos queda una fase del bordado del techo de palio por realizar, la cara interior de las bambalinas. Empezaremos a trabajar en el diseño y el bordado para ejecutarla. En lo patrimonial es lo más importante que tenemos en este mandato. Y luego seguir con el trabajo en cuanto a la espiritualidad, la labor social y cultural. También está a tres años vista todavía, pero nos toca si Dios quiere, el 50 aniversario de la refundación de la hermandad. En estos primeros años se va a ir viendo sin prisa pero sin pausa qué se va a hacer: tanto actividades culturales como cultuales para empezarlo a preparar desde ya.

-¿Tienen plazo para los trabajos del palio?

-Sí, la idea es empezar ya durante las vacaciones y a la vuelta de vacaciones para intentar tener el diseño aprobado por todos los hermanos antes de final de año y empezar a ejecutar los bordados con el mismo bordador y diseñador, Jesús Rosado y Rafael de Rueda.

-¿En qué momento humano ve a la cofradía tras la pandemia?

-El momento actual es de muchísimas ganas de llegar a la normalidad cien por cien y absoluta que teníamos antes de la pandemia. Estamos volviendo, pero todavía no hemos alcanzado ese clima de normalidad. La gente se ha podido ver en el pasado Domingo de Ramos en la estación de penitencia, durante la cruz y en la Feria. Tienen muchas ganas de hermandad, muchas ganas de participar, pero ahora mismo estamos todavía un poquito limitados. El capital humano es grandísimo en esta cofradía y sin problema.

-En los últimos días han sido actualidad por tener que recomponer las bandas tras la decisión de Amueci de no renovar. ¿Saben qué formación acompañará a la Virgen del Amparo?

-Todavía no. Como nos ha pillado la sorpresa de que Amueci no quería seguir con nosotros y adaptarnos con Tubamirum hemos hablado del Domingo de Ramos y luego ya veremos. De la Virgen del Amparo no lo tenemos todavía decidido.

-Realizaron un inventario profesional de todos sus bienes y restauraron al Señor Amarrado a la columna. ¿Además del palio tienen algún otro proyecto patrimonial importante a corto plazo?

-Sí, tenemos también pendiente la restauración del Señor de la Oración en el Huerto. Hicimos un pequeño proyecto para ver el estado actual porque, después de dos años sin salir, antes de salir en la última estación de penitencia Ana Infante nos hizo un pequeño estudio, y necesita restauración. Y entonces más pronto que tarde también intentaremos acometerla. Puede ser dentro de un año. En este mandato, seguro.

-¿Es urgente, requiere una intervención en profundidad?

-No, ése era el miedo que nosotros teníamos, pero no, nos dijo la restauradora que no, que no había problema. Es una restauración que hay que acometer por el paso de los años y por los condicionantes medioambientales, pero de estructura nada. Es un trabajo de conservación.

-La obra social del Huerto abarca muchos aspectos: ayudas informáticas para estudiantes, a personas con Alzheimer, damnificados de la guerra de Ucrania. ¿Por dónde seguirán actuando?

-Será continuista con el mandato anterior. Seguiremos trabajando con las mismas asociaciones, colegios y parroquias. Seguiremos con la Asociación de Alzheimer San Rafael, el colegio de la Piedad con las becas previstas para el curso siguiente, Cáritas parroquial, la Asunción del Figueroa y los hermanos que necesiten nuestra atención. La verdad es que hemos tenido una importantísima labor social, pero quiero dejar claro que detrás de esa labor social está el trabajo a la vista de muchos hermanos, de muchas asociaciones que nos echan una mano importante, entidades bancarias, entidades hosteleras. Gracias a ellos también la obra social de la hermandad es lo que es.

-¿Ya se pondrán manos a la obra con la conmemoración del cincuentenario de la refundación?

-Sí, a la vuelta del verano y no más tarde de los primeros meses de 2023 tenemos pensado empezar a formar una comisión del 50 aniversario, que será la junta de gobierno con algunas personas que se nombren para empezar a ver la programación. Haciendo las cosas poquito a poco y que no se amontone el trabajo y vayamos desahogados con algo tan importante para la hermandad. Algún tipo de exposición, algún tipo de libro, pero ahora mismo está todo un poco cogido con pinzas. Empezaremos a madurarlo a partir de los primeros meses del año que viene.

-¿En espiritualidad cuál será la línea?

-Seguiremos haciendo nuestras sesiones de formación. Cada quince días o tres semanas tenemos un invitado que viene y nos da una charla. También nuestro párroco y consiliario en cada uno de los cultos nos formamos con él y nos ayuda.

-También se adhirieron como hermandad al Año de la Familia, ¿qué balance realiza?

-Fue muy positivo, tanto a nivel de la diócesis, que estuvimos trabajando con ellos como a nivel de la hermandad. En Cuaresma tuvimos unas convivencias con los niños y sus padres dentro de la celebración del Año de la Familia.