Pasión en Cördoba
Coronación en Córdoba | La hora de la verdad para la Virgen de la Paz
La Catedral acoge este sábado por la tarde la solemne misa estacional durante la cual el obispo le impondrá la corona
La banda de música de Arahal y la de cornetas y tambores de la Salud acompañarán con su música la procesión de regreso a Capuchinos
Coronación de la Paz | La corona de la Virgen. al detalle
Coronación de la Virgen de la Paz | Cómo se gestó y desarrolló el anhelo de la hermandad
Más de seis años de espera desembocan en una corona. La coronación pontificia de la Virgen de la Paz ha conmovido, ha generado ríos de tinta. Muchos han soñado cómo será, con palabras y notas musicales, en forma de conferencia, de meditación, de pregón, ... de himno y de marcha procesional.
Tras decenas de actos culturales y de culto, antes y después de la pandemia de coronavirus, el presente lleva a la Catedral a las cinco de la tarde. Parecía una cita lejana en medio de la noche de la pandemia.
El blanco de la Paloma de Capuchinos está llamado a reinar sobre aquel período incierto en que se deseaba una coronación plena, sin aforos ni mascarillas. Y llegó.
El 15 de octubre, fecha asociada a Santa Teresa de Jesús, Doctora de la Iglesia, va a quedar para siempre ligada en Córdoba al reconocimiento que la Iglesia Católica otorga al fervor que la Virgen de la Paz y Esperanza despierta desde hace más de ocho décadas entre sus devotos: su coronación.
El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, le impondrá en la Catedral esta joya realizada por Manuel Valera con oro aportado por los devotos. Este rito se desarrollará justo después de la homilía del prelado.
Paso de palio
La Virgen está ya sobre su paso de palio. La ceremonia comenzará a las cinco de la tarde y a ella acudirán 1.300 invitados. Además, hay otro sector habilitado para otras 2.000 personas que podrán acceder con entrada libre sin invitación por la Puerta de las Palmas.
Como suele ser habitual, se disponen grandes pantallas que facilitarán la visión y un mejor seguimiento en directo dentro del templo. La misa estará concelebrada por el Cabildo Catedral, los hermanos menores capuchinos y el clero diocesano.
En toda gran celebración cristiana hay unos padrinos. En este caso son los religiosos de la Orden de Hermanos Menores Capuchinos.
Una reliquia del Beato Fray Leopoldo de Alpandeire, contenida en un relicario del siglo XIX realizado en plata, ha sido su regalo. Ha estado presente en todos y cada uno de los actos previos de la coronación celebrados esta semana, desde el traslado de ida hasta la posterior procesión triunfal de regreso.
La música
La Misa de la Coronación en do mayor, de Mozart, articulará musicalmente esta celebración. También se escucharán obras de Haendel, Vivaldi y Mendelssohn.
En el ofertorio sonará la 'Plegaria a María Santísima de la Paz y Esperanza', compuesta por Manuel Pérez. Al término de la solemne misa estacional de coronación pontificia sonarán la Salve de la Paz y el canto de despedida 'Los destellos de tu palio', también creados por Manuel Pérez.
La interpretación del repertorio correrá a cargo del Coro de la Fundación Miguel Castillejo. Los solistas son las sopranos Patricia Santos e Isabel López, el tenor Raúl Jiménez y el bajo José Miguel Torres. También intervendrá el contratenor Manuel Ruiz.
El acompañamiento instrumental será del Cuarteto Averroes, cuya plantilla se amplía para la ceremonia con el oboe de María Fernández, el contrabajo de Gonzalo Bordes y con el pianista Javier Ribelles al órgano. Todos ellos serán dirigidos por el barítono y director musical Ángel Jiménez.
Desde el mes de septiembre, la Virgen de la Paz no ha dejado de recibir obsequios de las hermandades de Córdoba y la provincia: ramas de olivo, tiaras, enaguas, rosarios, cruces, mariquillas y medallas. Con todas ellas, añadidas a la nueva saya, la diadema, la media luna de coronación y la corona, amplía su ajuar.
La corona, diseñada y realizada por el orfebre cordobés Manuel Valera es una catequesis en oro, oro blanco, cristal de roca tallado y pedrería. Es una ofrenda a la Virgen, con metal aportado por sus devotos, el regalo de unos hijos a su Madre.
Es una pieza única porque incorpora a una presea de dolorosa el cristal de roca. ¿Para qué? Para hacerla ligera y jugar con la blancura del palio y la Virgen. Por ello, reflejará la luz de alrededor, con todas sus variaciones.
La metáfora del cristal
El cristal, además, alude al catecismo de Pío XII que señala la virginidad de María como el cristal que traspasa el sol y no se rompe. Hay barroco en la corona. El resplandor lleva hojas y ramas con esa estética y pedrería incrustada.
Pero también va la modernidad de la geometría fractal presente en la naturaleza. Es lo que ocurre con la forma de las doce estrellas del Apocalipsis, en las que Manuel Valera ha empleado la técnica de la microfusión.
La hermandad de la Paz ha editado 2.000 ejemplares de un libro de la misa de coronación, que reproduce los documentos de coronación de la Santa Sede y el del obispo (por los cuales es pontificia y canónica), con toda la liturgia y la programación musical.
En el exterior
Las calles, repletas de ornamentación, esperan la procesión triunfal de la Virgen con colgaduras, banderines y flores de papel
Eso será en las naves de la Catedral, pero fuera, en las calles, la ciudad está preparada para recibir a la Virgen con una explosión de color. Colgaduras con el rostro de la imagen, el amarillo y el blanco vaticanos, el blanco de la Paz, el verde de la Esperanza, las palomas y anclas, todo listo para la gran fiesta posterior de la procesión solemne.
La Virgen, en su paso de palio, estará en las calle ocho horas. La noche y la madrugada serán para Ella, en su visita al Ayuntamiento, y las parroquias de San Andrés y Santa Marina, y su discurrir por los siempre icónicos jardines de Colón.
Ocho horas
Está previsto que el cortejo salga a las ocho y media de la tarde de la Catedral atravesando la Puerta del Perdón y se recoja en la nave de los pasos de Capuchinos alrededor de las cuatro de la madrugada.
La hermandad y los devotos han preparado un cielo de flores de papel, banderolas y colgaduras por todas las calles por las que la Virgen pasará a su regreso a Capuchinos desde la Catedral. El ambiente de fiesta lo llena todo.
Al igual que en el traslado, la banda de música municipal de Arahal pondrá sus marchas a la Virgen. Pero ahora se le añade un plus: abriendo el cortejo estará la banda de cornetas y tambores de la Salud. Esta última formación tiene previsto estrenar la marcha 'La Paz', obra de Francisco Javier Guzmán.
La junta de gobierno que lidera Enrique Aguilar y el actual equipo de capataces de la cuadrilla de hermanos costaleros, cuyo titular es Vicente Mengual, acordó que participen también los capataces Juan Berrocal, Rafael Muñoz y Alfonso Amate.
El itinerario completo es la Puerta del Perdón, Cardenal Herrero, Judería, la estrechez de Deanes, Conde y Luque, la plaza de la Agrupación de Cofradías, Blanco Belmonte, Ángel de Saavedra, Juan Valera y Santa Victoria.
Las Tendillas
Seguirá por la plaza de Santa Victoria, la plaza de la Compañía, Duque de Hornachuelos, las Tendillas y Claudio Marcelo. Pasará por el Ayuntamiento a las 23.30 horas, y discurrirá por la calle San Pablo.
Después estará en la plaza de San Andrés, Hermanos López Diéguez, Enrique Redel, Santa Isabel, la plaza de Santa Marina, la plaza del Conde de Priego, el pasaje de la Estrella, Isabel Losa, los jardines de Colón, Torres Cabrera y Capuchinos.
El tiempo acompañará, pues no hay previsiones de lluvia, y las temperaturas oscilarán entre los 14 y los 32 grados.
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