El número de pisos turísticos se dispara en Córdoba un 29% en el último año

A fecha de febrero del presente ejercicio, en la capital se contabilizan 1.526 pisos turísticos. Esa cifra implica un incremento interanual del 29,3%. Son 346 más que en el mismo periodo de 2022. Encaja en un periodo de recuperación de la llegada de viajeros hasta nuestra tierra tras el duro castigo del Covid, que, en su sacudida inicial, llegó a cortar de raíz los desplazamientos. En los últimos doce meses, más propietarios se han animado a volver a poner sus viviendas en este mercado -con el coronavirus, hubo un movimiento lógico de traslado de estos activos al segmento del alquiler no turístico- o se han estrenado en él.

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Eso sí, hay que tener en cuenta que el dato del segundo mes del pasado ejercicio tenía aún a cuestas la resaca de la epidemia -se acababa de sufrir el golpe de la variante Ómicron, si bien la vacunación estaba ya muy avanzada-, que afectó a esta fórmula de alojamiento, igual que a las demás. De hecho, en febrero de 2022, en Córdoba se contabilizaban 1.180 viviendas para albergar viajeros. Eran dos menos que un año antes (-0,2%) -el estudio sólo ofrece datos desde agosto de 2020-.

De vuelta al presente, todos estos pisos suman 7.089 plazas para albergar a quienes visiten la ciudad. Esa cifra implica que esta propuesta de alojamiento haya experimentado un aumento interanual del 26,2%. La capacidad para albergar viajeros en estas viviendas creció de forma que en 365 días pueden albergar a 1.471 visitantes más.

De la fuerza que muestran los pisos turísticos da idea la comparación con lo que supone la oferta más tradicional, la de los hoteles, hostales y pensiones. A fecha de febrero, de acuerdo también a guarismos ofrecidos por el INE, ese tipo de negocios tienen disponibles 7.280 plazas. Es decir, superan sólo por casi un 3% a la capacidad de alojamiento de estas viviendas.

El informe de este ente público recoge igualmente que los pisos turísticos que existen actualmente en Córdoba suponen un 1% del total de viviendas que tiene la ciudad. Hay que puntualizar que el INE toma como global del parque inmobiliario de la ciudad el del censo de 2011 -desde entonces, el número de hogares ha crecido en la capital-. Un año antes, representaban el 0,77%.

El peso de las viviendas destinadas a alojar viajeros por estos lares sobre el conjunto de los pisos se queda, además, por debajo de la ratio española (1,2%) y de la andaluza (1,6%).

Este trabajo también indica cuántas plazas de media ofrece cada uno de estos alojamientos: actualmente son 4,65 frente a las 4,76 de 365 días antes.

La capital vuelve a evidenciar en este informe su condición de motor del sector en nuestro territorio. De los dos millares de pisos turísticos que se contabilizan en la provincia, la ciudad de Córdoba aporta tres de cada cuatro (76%).

Su peso en el número de plazas es menor, aunque sigue siendo enormememente contundente. Aporta el 67,4% de las 10.515 disponibles en todas sus localidades. Hay que tener en cuenta que la capacidad media de los pisos turísticos de la capital, la citada de 4,65, se queda por debajo de la ratio que se alcanza en el global de la provincia (5,24).

Por último, en los 77 municipios cordobeses hay actualmente 2.006 viviendas de este tipo cuando hace un año esa cifra era de 1.535. Al cruzar ambos datos, se indica que el aumento es del 30,7%. Todos ellos ofrecían, redondeando, diez millares y medio de plazas. Es una cifra superior en un 27,3% a la que se registraba en febrero de 2022.

La oferta de este tipo de alojamientos crece en sintonía a la recuperación global del turismo, y de ello dio ayer cuenta otra estadística significativa para el sector como la Encuesta de Coyuntura Turística de Andalucía (ECTA), en este caso dependiente del IECA, el órgano oficial de la Junta de Andalucía.

Durante el primer trimestre de 2023 visitaron la provincia de Córdoba un total de 382.463 personas. Ese dato supone un 14,2% más que en el mismo periodo de 2022, pero es el incremento más bajo de cuantos se dan en las provincias andaluzas. Sin embargo, mejora uno de los indicadores con peor recorrido hasta ahora como es la estancia media. La ECTA deja para este trimestre 3,7 días de media en que los turistas pernoctaron. Supone un 30 por ciento más y de los mejores aumentos que se producen en toda la comunidad autónoma.

En el sondeo que el IECA hace a los visitantes se pregunta por las motivaciones que les lleva a cada una de las provincias. En el caso de Córdoba el 68% de sus visitantes dice acudir a ella por vacaciones mientras que un 20% quiere visitar a amigos.

Otro de los guarismos que más influyen en las perspectivas del sector es el gasto medio del turista. Durante los meses de enero, febrero y marzo pasados, cada persona se dejó de promedio 79 euros en la provincia de Córdoba, lo que supone una subida interanual del 3,8%. La mejoría tiene sus contrapuntos.

Por un lado, el crecimiento es menor de lo que la inflación ha subido en un territorio como este (en torno al 8 por ciento en esos meses). Y el segundo factor corrector es que se trata del quinto desembolso más alto, cinco euros por encima de la media regional (74 euros).