Oposiciones de bombero en Córdoba: posibles nuevas fechas y quién decide sobre si celebran o no

La detención este jueves de una bombera del Consorcio Provincial, dependiente de la Diputación, por parte de la Policía como presunta responsable de un presunto delito de cohecho y otro de descubrimiento y revelación de secretos, siembra de nubarrones negros el futuro del procedimiento. La detenida fue puesta en libertad con cargos.

Los aspirantes que estaban convocados a la prueba del domingo (el proceso lo iniciaron más de 600) tienen ahora una gran incógnita sobre si se acabará toda la oposición o será tumbada por este turbio asunto.

El Ayuntamiento de Córdoba, que decidió suspender las oposiciones este lunes tras registrar una denuncia en la Policía Nacional al conocer los graves hechos, está a la espera de que se concluya la investigación y haya algún pronunciamiento judicial al respecto. Bien que se suspendan las oposiciones por completo, bien que se le permita reactivar el tribunal -el mismo o uno nuevo- y concluir las pruebas para reforzar su plantilla de bomberos-conductores.

Fuentes municipales han asegurado a ABC que este viernes podría haber alguna novedad al respecto, aunque prefieren ser prudentes. Hay que recordar que el tribunal de estas oposiciones está compuesto por cinco personas, entre ellas, técnicos municipales de Recursos Humanos y bomberos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) así como del propio Consorcio (uno de los cinco).

Según ha podido saber ABC de fuentes de la investigación, el teléfono desde el que la detenida llamó al aspirante para ofrecerle, presuntamente, preguntas de la prueba práctica final a cambio de 1.000 euros ha sido determinante para que la Policía señale su posible implicación en los hechos.

Cuando el aspirante recibió esa llamada, puso los hechos en conocimiento del Sindicato Andaluz de Bomberos en Córdoba, quien hizo una comprobación de estas acusaciones y comprobó que el intento de compra era una realidad. A partir de ahí se trasladaron los hechos a la Concejalía de Recursos Humanos del Ayuntamiento, que dirige la popular Cintia Bustos, quien finalmente decidió denunciar los hechos.