Sánchez, abierto a un gobierno formado por varios partidos

Entre las «fuerzas del cambio» están tanto Ciudadanos, con quien Sánchez se reunió ayer , y Podemos, con cuyo líder se verá hoy. Pablo Iglesias acudirá al encuentro con su oferta de un gobierno de coalición, una opción que Sánchez no ha descartado.

«No me cierro a nada. Estamos en un momento nuevo, pisando terreno ignoto y, por tanto, estoy abierto a explorar otras vías, y por su puesto, si tiene que haber una coalición o no. No lo sé. Lo importante es que esa coalición sea producto primero de un programa de gobierno compacto». ha dicho. « Incluso, ¿por qué no puede haber más partidos? », se ha preguntado. Sánchez ha dicho varias veces que es realista y pide «lo imposible».

Igual que el PSOE ha asumido el encargo del Rey de intentar formar gobierno, Sánchez ha reclamado al resto del partido que «sean generosos y den un paso al frente», que piensen «qué pueden hacer juntos para materializar el cambio». « Si cedemos para que ganen los españoles, bienvenida esa cesión» , ha señalado: «¿Cuál es la alternativa si no es intentar formar gobierno?».

Sánchez es consciente de la dificultad de la tarea que le espera —«Todo el mundo me dice: "Pedro, no va a salir"»—, y para ello está dispuesto a ir contra los deseos del expresidente Felipe González : «Respeto la opinión de Felipe González pero estamos en un tiempo nuevo».

El secretario general del PSOE ha afirmado que se reunirá con González cuando termine las primeras reuniones con los partidos políticos, después de que ayer no se produjera este encuentro por motivos personales.

Unas horas antes de su encuentro con Iglesias , Sánchez ha tenido la mano al líder de Podemos para buscar una solución a la polémica de la localización del partido morado en el Hemiciclo del Congreso, aunque ha reconocido las diferencias que los separan: «Mal empezamos si Podemos dice que quiere incorporarse a mi gobierno porque no se fía de mí».

Sánchez no contempla la posibilidad de que ERC y Democracia y Libertad se abstengan para que pueda ser investido. «La aritmética en la que me estoy moviendo precisamente para conformar gobierno supondría no depender de esos votos independentistas», ha dicho.

Sobre cómo afectaría un fracaso a su futuro político, ha respondido: «La vida sigue y estaré donde quieran mis compañeros y los militantes del PSOE». «Queda muchísimo tiempo, déjeme por lo menos soñar, intentar ver si puedo formar gobierno», ha añadido.