Una cuarta parte de los negocios en España entra en pérdidas tras la caída de ventas del último año

La causa principal que esgrimen los 6.000 gestores distribuidos por toda España consultados para la realización del estudio es la caída de las ventas experimentada durante los últimos doce meses. Concretamente, el 26% de los pequeños y medianos negocios facturó menos en 2023 que en 2022, frente a un 47% que ha facturado más. Así, frente a la cuarta parte de negocios que entró en pérdidas un 64% cerró el pasado ejercicio con beneficios, según las cifras ofrecidas por el Consejo General de los Colegios de Gestores Administrativos.

«Seguimos con más de 700.000 negocios en pérdidas, 600.000 con serios problemas de liquidez, y unos 700.000 negocios que han incrementado su endeudamiento el pasado año, el mismo número de negocios que el pasado año facturaron menos que en 2022. Y aunque se ha reducido el porcentaje de negocios que operan 'fuera del sistema', hasta un 12%, sigue siendo un número elevado y un dato tremendamente negativo», explica el presidente del Consejo General de los Colegios de Gestores Administrativos, Fernando Jesús Santiago Ollero, sobre una de las consecuencias de este empeoramiento de la posición financiera de las pequeñas y medianas compañías, también atenazadas por el incremento de costes de producción y de los costes laborales en los últimos años.

Otro de los aspectos que también ha ejercido presión sobre las pymes españolas está en el endurecimiento de la política monetaria, que ha forzado un importante crecimiento de los costes de financiación para las empresas, lo que además comporta un riesgo significativo sobre las decisiones de inversión privada. En este sentido, como premisa, el interés de los nuevos préstamos concedidos por la banca a las empresas ha pasado del 1,44% en enero de 2022 al 5,02% de media en diciembre de 2023.

Aquí, aunque un 39% de los negocios ha reducido el endeudamiento durante el pasado año, hay un 26% que lo ha incrementado, lo que deja en torno a 600.000 pequeños negocios con serios problemas de liquidez. Además, como advertía el presidente de los Gestores, al menos el 12% de los negocios están funcionando «fuera» del sistema: en esta ocasión, consultados sobre la existencia de negocios que no «declaran» todos los salarios que pagan, y el resultado es que el 5% de los negocios cuentan con algún salario que no lo está.

Otro de los datos significativos que arroja el Barómetro es que tan solo el 13% de los pequeños y medianos negocios han solicitado Fondos Europeos Next Generation: de ellos, el 76% ha obtenido ya una respuesta positiva frente a un 6% a los que se les han denegado los fondos, mientras que un 17% de los negocios que solicitaron los fondos están esperando resolución.

En este punto, el 56% de los Gestores Administrativos reconocen que cuentan con clientes que hubieran necesitado solicitar Fondos Next Generation, pero que no lo han hecho bien por falta de información transparente (55%, se podían elegir varias respuestas), bien porque consideran que los trámites son muy complicados (45% o bien porque no cumplían con los requisitos exigidos (38%).

Cabe destacar por último que el 64% de los gestores considera que 2023 fue un buen año para los negocios. De estos, el 34% cree que 2024 va a ser mejor, el 41% cree que será igual al 23, y el 25% piensa que el año 2024 va a ser peor. Mientras que el 36% de los encuestados considera que 2023 ha sido malo: de ellos, el 17% cree que el 2024 va a mejorar, el 39% piensa que va a ser igual y el 44% opina que 2024 será peor.

«La mayoría de mis compañeros considera que 2023 ha sido un buen año», explica Santiago, advirtiendo de que «los problemas de liquidez son persistentes y se incrementa el endeudamiento de muchos de los negocios, en el mismo porcentaje de negocios que han facturado menos». «Creo sinceramente que el nivel de resistencia de muchos de ellos se ha alcanzado ya y que 2024, con las incertidumbres que se nos están planteando, puede ser la puntilla para muchos de ellos», avisa.

El presidente de los Gestores cree que «debemos centrarnos en proponer soluciones para ese porcentaje de negocios que no levanta cabeza, en torno al 20-25%, pues en caso de desaparecer muchos trabajadores irán al paro», lamenta deseando que «ojalá que el optimismo de muchos de mis compañeros de que 2024 será mejor se cumpla y que alguien coja las riendas de los que están mal heridos y podamos recuperar a la mayoría».