Los precedentes de Sevilla como sede de grandes torneos futbolísticos

Como sucediera hace casi 40 años , Sevilla volverá a convertirse en el epicentro del fútbol internacional. Y es que en el Mundial de España de 1982 , la capital hispalense fue sede del Grupo 6 del mejor torneo del balompié.

Aquel 14 de junio de 1982 , las selecciones de Brasil y de la Unión Soviética se enfrentaban en el Ramón Sánchez-Pizjuán para dar el pistoletazo de salida al Grupo 6. El estadio nervionense había sufrido una gran remodelación para albergar la fase final del Mundial de España 1982. Los soviéticos conseguían marcharse con ventaja al descanso gracias a un tanto de Bal , mientras que la selección canarinha conseguía remontar (2-1) en la segunda mitad gracias a los goles de Socrates y Eder , éste último en los compases finales de partido, para dar los dos primeros puntos al combinado de Tele Santana.

Apenas cuatro días después, el otro gran estadio de Sevilla, el Benito Villamarín , también se convertía en s ede del Mundial de España 1982 , al albergar el duelo entre los brasileños y la selección de Escocia . Brasil volvía a ver como su rival se adelantaba en el marcador gracias a un tanto de Narey , pero esta vez los de Tele Santana igualaban antes del descanso gracias a un tanto de Zico , estrella de la verdeamarela . Ya en la segunda parte, el jogo bonito de los brasileños se impuso a la férrea defensa escocesa y los tantos de Óscar, Eder y Falcao daban otra victoria (4-1) a Brasil.

Ya en el último encuentro del Grupo 6, que se disputó el 23 de junio de 1982 , Brasil se enfrentó a Nueva Zelanda , otra vez en el Benito Villamarín . Los de Tele Santa golearon (4-0) a los neozelandeses gracias a un doblete de Zico y a los tantos de Falcao y Serginho.

El 8 de julio de 1982 , Sevilla también tuvo la suerte de poder gozar de una de las semifinales del torneo. El Sánchez-Pizjuán acogía el partido entre Alemania y Francia , que muchos tildan del "mejor encuentro de la historia de los Mundiales". Los germanos y los galos iban a empatar a uno tras el tiempo reglamentario y ambos anotarían dos goles para el empate definitivo (3-3) al término de la prórroga. Los alemanes se llevaron el pase a la gran final en una disputada tanda de penaltis , aunque caerían derrotados por Italia tres días después en el Santiago Bernabéu.

Ya en competiciones de clubes, el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán también se jugó en 1986 la recordada final de la Copa de Europa entre el Barcelona y el Steaua de Bucarest , que se decidió a favor del club rumano por penaltis. En el estadio de la Cartuja se disputó en 2003 la final de la Copa de la UEFA entre el Oporto y el Celtic de Glasgow , con victoria final para los portugueses. Mientras, el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán ha sido elegido para albergar en 2022 la final de la Liga Europa.