'El emperador filósofo', de Ignacio Pajón: el legado de Marco Aurelio

El autor, Ignacio Pajón Leyra, profesor de filosofía antigua en la Universidad Complutense, nos revela en el texto de contracubierta lo que pretende con la monografía que saludamos: «Mi objetivo no es desvelar la vida de Marco Aurelio, ni analizar su filosofía, sino mostrar y tratar de comprender los motivos por los que su figura se ha afianzado de manera tan firme en la cultura occidental a lo largo de los mil ochocientos años largos que han transcurrido desde que murió».

ENSAYO

'El emperador filósofo'

• Autor Ignacio Pajón
• Editorial Fórcola
• Año 2024
• Páginas 288
• Precio 28,50 euros

Para ello divide su libro en cuatro partes. La primera de ellas, 'Marco Aurelio en los libros', habla, entre otros temas, de fray Antonio de Guevara y su 'Libro áureo del emperador Marco Aurelio' (1528), que obtuvo un éxito increíble en la Europa del Quinientos, o de la recentísima novela gráfica 'Verissimus' (2022), de Robertson y Fraga, o de las conexiones íntimas que el ideario filosófico del emperador romano mantiene con el 'bushidō', código del honor por el que se regía en el Japón ancestral la vida de los samuráis.

La segunda parte se titula 'Marco Aurelio en el arte' y consagra su contenido a la iconografía del sabio emperador, desde la columna Aureliana a la celebérrima estatua ecuestre de Marco ubicada en la colina del Capitolio, única de este tipo que ha llegado hasta nosotros de forma excepcional, pues los avatares políticos y religiosos hicieron que fueran destruidas otras muchas estatuas de emperadores, en la idea de que no eran más que ídolos paganos que debían ser erradicados de la nueva Roma cristiana.

Junto a estas muestras de la presencia de nuestro emperador en el arte romano, figuran sendos comentarios a dos cuadros de pintores «modernos», a saber, 'Marco Aurelio distribuye pan para el pueblo' (1765), de Joseph-Marie Vien, y 'Últimas palabras de Marco Aurelio' (1844), de Eugéne Delacroix, magnífico lienzo que se encuentra expuesto actualmente en el Museo de Bellas Artes de Lyon. Entre las páginas 96 y 97 del libro de Pajón se inserta pliego y medio de hasta 43 imágenes a todo color que reproducen las distintas obras de arte que ha suscitado el filósofo emperador.

La parte tercera se ciñe a la huella que ha dejado Marco Aurelio en el cine hasta nuestros días, con 'La caída del Imperio romano' (1964), de Anthony Mann, y 'Gladiator' (2000), de Ridley Scott, como hitos más significativos. La cuarta, 'Marco Aurelio en escena', estudia las piezas teatrales en las que nuestro emperador figura como personaje, como 'El villano del Danubio y el buen juez no tiene patria' (1714), de Juan de la Hoz y Mota, o 'Marco Aurelio', de Agustín Muñoz Sanz, obra estrenada en el Teatro Romano de Mérida, dentro del Festival de Teatro Clásico, el 24 de agosto de 2016.

Un breve epílogo, las notas exegéticas (que deberían haber figurado a pie de página), una muy útil cronología, la bibliografía (selecta, y se agradece que lo sea, pues se advierte en seguida que los libros y artículos presentes en ella han sido consultados por el autor y no meramente citados) y, finalmente, un índice onomástico, que en este tipo de libros me parece punto menos que obligatorio.

Para completar el mosaico, más allá del rico legado multidisciplinar que nos ha dejado Marco Aurelio, el lector interesado no puede ni debe dejar de leer —hay varias traducciones en castellano— el conjunto de pensamientos que, escritos en griego y titulados en origen 'Tà eis heautón' ('Para sí mismo'), constituyen una de esas lecturas imprescindibles que hay que llevar a cabo antes de morir.