Piña

Hasta hace poco se utilizaba fundamentalmente como postre, natural o en conserva y como aderezo en las ensaladas . Sin embargo, en los últimos años, la influencia del recetario oriental ha llevado a la piña a los platos principales. Siempre controvertida sobre la pizza , además de por su sabor, si por algo es apreciada la piña es por sus numerosas propiedades.

Con apenas 50 calorías en 100 gramos, se trata de una fruta altamente saciante por su alto contenido en agua y su aporte de fibra, lo que favorece el tránsito intestinal y ayuda a mantener el equilibrio hídrico en el organismo. Además, la piña es fuente de ácido fólico, esencial para el sistema inmune por lo que ayuda a las defensas a la vez que sus propiedades anticoagulantes mejoran la circulación.

Rica en antioxidantes, la Ananas comosus es una planta perenne de la familia de las bromeliáceas y es precisamente su contenido en enzima bromelia lo que la hace tan interesante porque facilita la digestión de las proteínas. Por eso resulta tan adecuada para las personas con problemas digestivos o acidez y pesadez de estómago. Además, tiene propiedades antiinflamatorias que puede ayudar a combatir el dolor muscular en los deportistas y colabora en la salud bucodental al reducir el riesgo de gingivitis a la par que mejora la salud intestinal.

La piña resulta ser un auténtico tesoro nutricional además de un delicioso tentempié y una forma sencilla de solucionar un capricho dulce. Para saber si está en su punto, lo mejor es tirar de una de sus hojas con energía y sentir si se desprende con un ligero crujido. De ser el caso estará en su punto óptimo de madurez ya que en las verdes la hoja permanece pegada al fruto y cuando casi se cae sola es que ya está pasada.

La piña es un alimento que fundamentalmente aporta hidratos de carbono, 13 gramos por cada 100 gramos de fruta, de lo cuáles, casi 10 son azúcares . Sin embargo, cabe destacar que el azúcar de la fruta no se metaboliza igual que la industrial por lo que su comportamiento en el cuerpo es diferente y más saludable. Muy rica en vitaminas del grupo B también es una excelente fuente de vitamina C y aporta minerales como calcio , hierro, magnesio, manganeso, fósforo, potasio, sodio y zinc.

Los efectos negativos de la piña vienen fundamentalmente derivados de su consumo en exceso, habitual en algún tipo de dietas poco equilibradas que basan la alimentación en la piña. En estos casos puede producirse acumulación de vitamina C que se materializa en diarrea, adores y vómitos. Sin embargo, tiene más que ver con un consumo irresponsable que con las propiedades de la fruta en sí. También puede desaconsejarse su consumo en personas con gastritis o úlceras irritables ya que su acidez puede causar malestar.