Hinojo

Esta es una planta que puede llegar a medir hasta un metro y medio de altura, tiene las hojas plumosas y las flores amarillas. De esta planta, tan utilizada en la cocina mediterránea por su aroma, se aprovecha todo . Como hierba aromática se utilizan los tallos y las hojas picados, como especia, las semillas secas, y como hortaliza, el bulbo. Las semillas son pequeñas, alargadas y ligeramente curvas y desprenden un ligero olor a anís.

Existen dos tipos de hinojo: el silvestre y el dulce . Del primero, el salvaje, que crece de forma espontánea, se utilizan sus tallos y sus semillas para aromatizar. El dulce, también llamado de Florencia, es considerado una hortaliza y se come el bulbo, carnoso, aromático y tierno. De él aparecen unos tallos crujientes y un sabor anisado. Este tipo de hinojo se puede encontrar en el mercado desde el otoño hasta el mes de junio.

Las semillas del hinojo contienen un aceite esencial, rico en anetol y con proporciones de otras sustancias como el estragol y alfapineno. Las hojas de esta planta contienen flavonoides, mientras que la raíz, cumarinas. Por todo esto, el hinojo es una planta con múltiples usos en medicina natural .

El primer beneficio y más característico del hinojo es que ayuda a regular el aparato digestivo. Su consumo favorece la digestión y la eliminación de gases . Su ingesta es muy beneficiosa para el estómago.

También se pueden hacer infusiones de hinojo que ayudan a abrir el apetito, disminuir el dolor de estómago y combatir la inflamación del vientre.

El hinojo es un buen recurso natural para combatir el estreñimiento. Para las embarazadas es muy eficaz para disipar las náuseas y mareos durante la gestación. Para las madres lactantes, ayuda a aumentar la producción de leche.

Además, el hinojo es perfecto para las personas que tengan tendencia a la retención de líquidos, ya que favorece la emisión de orina . Su consumo también evita la aparición de infecciones como cistitis, uretritis u oliguria (disminución de la producción de orina).

Pero el hinojo no solo tiene beneficios en el interior de nuestro organismo, también tiene mucha utilidad como uso externo y es perfecto para aliviar las irritaciones de los ojos cansados o con conjuntivitis .

El hinojo también es un aliado perfecto para combatir el mal aliento (se pueden masticar sus semillas después de las comidas), la gingivitis y las infecciones bucales.

El aceite esencial de hinojo se utiliza en la industria alimentaria para dar sabor y aromatizar. También se utiliza en la industria de la perfumería y cosméticos en componentes para hacer cremas dentales, jabones y lociones para después del afeitado, por sus propiedades calmantes y antiinflamatorias.

Las semillas, hojas y cogollo del hinojo contienen azúcares, fibra, sales minerales (potasio, calcio, magnesio y fósforo) y vitaminas A, B3 y C, proteínas, carbohidratos, ácido fólico y aceites esenciales. Además, el hinojo tiene un bajo contenido en grasas (0,2 mg en el bulbo por cada 100 gramos de parte comestible y 13, 6 mg en los frutos).

Esta planta se utiliza en la cocina desde hace miles de años. Su uso en potajes y guisos con legumbres es bastante habitual, ya que los hace mucho más digestivos. Cuando esta planta aromática acompaña a diferentes platos con pescado como protagonista, le da un toque anisado muy particular.

El hinojo es muy importante en la gastronomía mediterránea, pero sin duda su uso destaca sobre todo en Italia, donde en algunas ocasiones mezclan el sabor dulce de la raíz del hinojo (con recuerdos a regaliz) con alguna salsa que tenga picante. De esta forma consiguen un contraste de sabores muy especial. También se puede encontrar salteado con otras verduras para dar un toque diferente al plato.