Luis Herrero

Olas y falsedades

Lo de hoy en el Congreso será la representación de una farsa

Luis Herrero

Cuestión de respeto

El prestigio institucional no está por encima del que merecen las personas que lo encarnan

Luis Herrero

Federico

De todas las trincheras que hemos compartido, la más nuestra ha sido la que él cavó con sus propias manos hace ahora un cuarto de siglo

Luis Herrero

El hombre que sabía demasiado

Hay locos que se creen Napoleón y otros que parecen espeleólogos empeñados en seguir cavando un hoyo

Luis Herrero

Las tres Españas

Me refiero a aquellos a quienes la política les interesa lo justo, que pasan olímpicamente de las divisas de las ganaderías

Luis Herrero

Estómago a prueba de bomba

Los simpatizantes del PSOE seguirían votándole aunque Ábalos cantara la Traviata

Luis Herrero

La conspiración

Tenemos un poder colonizador que lo acapara casi todo

Luis Herrero

Horizonte negro

A pesar de lo que dice Sánchez, pruebas haberlas haylas y terminarán saliendo

Luis Herrero

El riesgo del hartazgo

Los políticos españoles son tan cansinos que se han vuelto invisibles

Luis Herrero

Los puentes de Madison

Algunos de mis amigos son tajantes: el amor tiene fecha de caducidad. Siete años. Cuando se va, se va para siempre

Luis Herrero

A oscuras

Los españoles sobrellevaban la incertidumbre con su ingenio

Luis Herrero

Una grieta en la roca

El cónclave tendrá que elegir entre pacificar la división interna o seguir adelante con los faroles, apostando por un representante del sector continuista

Luis Herrero

Torrijas

Me temo que mis prácticas de piedad en esta época del año no son merecedoras de consuelo alguno

Luis Herrero

La olla de Pumpido

La prueba de su desvarío no es sólo que haya alumbrado una idea tan peregrina, sino que se empecinara en librar una batalla que no podía ganar

Luis Herrero

El enigma de Dios

¿Que si existe la resurrección, Cercas? No se lo preguntes al Papa. Pregúntaselo al credo

Luis Herrero

Algunos hombres malos

Pumpido pagará por sus pecados, los procedimientos judiciales zarandearán los cimientos de Moncloa y la mayoría parlamentaria entrará en barrena