Esteban: «Lo de Page con el semáforo ha sido una bufonada»

El asunto es que, como el miércoles adelantó ABC, finalmente el Ayuntamiento ha cedido en el pulso que mantenía con la Junta de Castilla-La Mancha por ver quién se encargaba de la seguridad vial en la zona. Ayer Esteban aprovechó para criticar al alcalde por mantener taponadas las dársenas cas dos meses. «Creo que es una auténtica bufonada del señor García-Page que aparece ante los vecinos de Toledo como un auténtico desastre en materia de gestión y como un auténtico comisario político que lo único que ha buscado es fastidiar a los ciudadanos intentando no poner en marcha una infraestructura básica. Si no fuera por la importancia que tiene, lo único que puede provocar es una auténtica carcajada», dijo. Y se preguntó también «cuánto tiempo habría tardado en construir el remonte si solo para poner un semáforo ha tardado mes y medio».

Desde las filas municipales, la versión de los hechos es distinta. Perezagua comentó ayer que la decisión «se ha tomado es después de darles un plazo de 15 días porque la obra es de titularidad municipal». Sin embargo, el no cumplir ese plazo se debe al «pequeño matiz» de la carta de Gicaman «diciendo que no tienen inconveniente en que nosotros lo hagamos». E insistió en que el Ayuntamiento «ha entrado cuando la comunidad ha dado su autorización».

Pero hay que recordar que la autorización de Gicaman llegó solo un día después de que el Ayuntamiento le enviara una carta con el ultimátum. Este periódico preguntó ayer si la autorización no se habría podido pedir cuando se inauguró la obra, no dos meses después, a lo que Perezagua contestó: «Hemos pedido varias veces la reunión con la Junta y todavía no la hemos tenido. Lo que no podemos es asumir que una cosa mal hecha se abriese a costa de la inseguridad de las personas que circulan por ella». Por último, el portavoz municipal recordó que la Junta «no quiere» entregar la obra.