La ministra de Justicia avisa de que la IA no puede utilizarse para recrear desnudos de menores: «Es pura pederastia»

Las declaraciones se producen tras la polémica desatada en Badajoz donde las imágenes de una veintena de menores fueron trucadas por una 'app' de IA mostrándolas desnudas. Hasta el momento hay 11 denunciadas presentadas a la Policía por los hechos, según confirmó a AFP un portavoz del cuerpo.

La responsable de Justicia ha advertido de que los delitos relacionados con la Inteligencia Artificial y la recreación de contenidos sexuales «cada vez se están sofisticando más«, por lo que ha reclamado que se utilice esta tecnología »siempre dentro de un marco ético y de un marco referencial«. »No puede ser utilizada para esto«, ha puntualizado.

Respecto al caso de las menores de Badajoz, Llop ha hecho referencia al principio fundamental de la protección superior del menor. Así, ha explicado que esto tiene que llevar a que siempre que se hagan interpretaciones de la legislación «tiene que ser con esa perspectiva de interés superior del menor«.

»El interés superior del menor nos llevaría a pensar que también habría una protección penal de las víctimas frente a ese tipo de conductas y una protección penal de la infancia en general frente a la tenencia de pornografía infantil realizada a través de la Inteligencia Artificial«, ha asegurado.

No obstante, la ministra de Justicia en funciones ha reconocido que actualmente «prácticamente no hay jurisprudencia sobre esto» en España.

Asimismo, ha explicado que este tipo de delitos generan «obstáculos muy importantes» en las investigaciones porque, para identificar a las víctimas, sobre todo cuando son imágenes manipuladas, «cuesta mucho».

«Nos toma mucho trabajo, se utilizan muchos recursos para ello, pero tenemos grandes profesionales que están trabajando. Es un trabajo muy difícil para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que produce grandes desgastes», ha manifestado.

Para combatir este tipo de delitos, el Ministerio de Justicia, según ha afirmado Llop, está potenciando las oficinas de asistencia a las víctimas, a las que también pueden acudir para «para pedir asesoramiento, para pedir ayuda o pedir cualquier tipo de apoyo». «Son conductas gravísimas, muy graves y no debe caber impunidad ni aunque se trate de imágenes manipuladas», ha concluido.