El Abate Marchena, una vida de película que ya tiene su novela

Juan Pedro López Núñez es un utrerano que desde los años 60 reside en Cataluña, pero que un buen día entró en una nueva dimensión cuando ojeando la ‘Enciclopedia del Erotismo’ de Camilo José Cela, encontró una misteriosa referencia al Abate Marchena, un personaje que había nacido en su mismo pueblo. Desde ese momento comenzó un reto en la vida de este utrerano emigrado: devorar toda la obra de Marchena, así como todos los libros que se habían editado sobre él.

El Abate Marchena es uno de los principales representantes de los denominados «intelectuales afrancesados» que surgieron a finales del siglo XVIII y primeros del XIX en España, aunque lo cierto es que ninguno de ellos demostró con su propio modo de vida un compromiso con sus ideas tan claro y diáfano como lo hizo el propio Marchena. Con apenas veinte años, el Abate fundó en Madrid el periódico ‘El Observador’, publicación por la que fue perseguido por la Inquisición, viéndose obligado a huir a la Francia revolucionaria. Es ahí donde comienza el verdadero periplo de Marchena, quien estuvo del lado de los girondinos, de los jacobinos y formó finalmente parte del séquito de confianza del propio Napoleón.

Una historia vital que pedía a gritos la creación de una novela, algo en lo que ha puesto todos sus esfuerzos el utrerano Juan Pedro López Núñez, quien recientemente ha presentado ‘El Regreso del Abate’, un trabajo de más de 700 páginas, que ha sido editado por Chiado Editorial y que fue finalista en el premio de novela Fernando Lara de Sevilla.

«Con la elaboración de esta novela lo que quiero reivindicar es su nombre, pido a todos los que lean la novela que dejen a un lado las ideologías y que se centren en el personaje. Para mí el Abate Marchena es de lo mejor que hemos tenido en Utrera, era el mayor políglota de su tiempo, ya que traducía el inglés, italiano, francés, y aprendió alemán en tres meses. Además el latín y el griego eran lenguas que dominaba perfectamente», explica Juan Pedro.

Marchena no tuvo ni mucho menos una vida fácil y el hecho de ser un defensor a ultranza de los valores universales y de los ideales que promulgaba la ilustración europea, le granjeó numerosos enemigos en su propio país. En definitiva Marchena ha sido durante décadas un personaje maldito dentro de algunas interpretaciones de la historia de España, que se han encargado de denominarlo como un simple «afrancesado» y han tratado de desprestigiarlo. Ha entrado a formar parte de la denominada «leyenda negra» española, principalmente debido a la visión de su vida que dejó el historiador Marcelino Menéndez y Pelayo.

Con respecto a esta carga que ha tenido que soportar históricamente el legado del Abate Marchena, el autor del libro lo tiene especialmente claro, cuando asegura que «si entras en el personaje, dejando a un lado la superficialidad, el motivo principal de su vida era solucionar los problemas que sufría una España atrasada en su época y sumida en la miseria, la pobreza y la superstición. Profundamente era un hombre bueno».

Juan Pedro López Núñez ha realizado un profundo trabajo de investigación durante cuatro años para elaborar esta novela, cuya trama se inicia en el momento en el que el Abate acompañó a José Bonaparte (Pepe Botella) en 1808 en su llegada a tierras españolas para ejercer de monarca. «Es realmente fascinante como un señor que nació en la Andalucía más profunda llegó a ser tan importante en la Europa de su época. Espero que con esta novela los lectores puedan profundizar en la historia del Abate Marchena», explica el autor.