Enterrarán la arena del Anfiteatro de Carmona para protegerla

En el suelo se aprecian los canales por los que corrían las cuerdas que desplazaban las jaulas desde el lugar en el que se ocultaban hasta salir al exterior . También los agujeros en el suelo que se usaban para clavar los postes con los que se creaba una gran jaula para que lucharan las fieras.

Se trata de una actuación reversible y que consiste en proteger el espacio de la arena del anfiteatro mediante áridos y material geotextil. Para no perder la visión de esa infraestructura de canales y orificios se empleará un árido de distinto color al del relleno, separado por una chapa galvanizada que facilite distinguirlos, y que con el paso del tiempo se evite la contaminación mutua. Los trabajos se realizarán manualmente, prescindiendo del uso de máquinas que puedan afectar al patrimonio arqueológico.

El Anfiteatro Romano de Carmona es según un estudio del arqueólogo Alejandro Jiménez publicado por la Universidad de Sevilla el edificio de este tipo más antiguo de España al construirse en el siglo I a.d.C. Se ubica justo frente a la Necrópolis y tenía capacidad para 18.000 espectadores. Fue descubierto en 1885 por Jorge Bonsor y Juan Fernández López, pero hasta 1970 no fue exhumado por completo. Desde entonces ha sido escasamente estudiado e investigado. Hasta hace poco ha estado cerrado a las visitas.