Sucesos
La familia del joven lebrijano arrollado en Conil denuncia graves irregularidades en el procedimiento
Dos meses después del accidente no se habían incoado diligencias en un juzgado de Chiclana
Silvia Tubio
Dos hermanos de Adrián Vázquez , el joven lebrijano que fue atropellado el pasado 24 de julio en Conil , se han armado de valor esta mañana para denunciar en compañía de su abogado « graves irregularidades» en el procedimiento judicial que ... instruye el juzgado de Instrucción nº 3 de Chiclana. Adrián fue arrollado por un vehículo en el Paseo Marítimo a las siete de la mañana. El conductor se dio a la fuga y horas después compareció ante la Policía Local reconociendo los hechos. La víctima, de 25 años, se encuentra en coma.
La irregularidad más notoria que ha destacado el letrado Luis Romero es que desde el 24 de julio que se produjo el accidente hasta mediados de septiembre que su despacho se hizo cargo del caso no se incoaron diligencias en el juzgado chiclanero. «Dos meses pasaron para un caso tan grave en el que se dirimen delitos como la omisión del deber de socorro, la conducción temeraria y que si Adrián hubiera fallecido estaríamos ante un homicidio imprudente ».
Por eso y porque hasta el próximo 29 de octubre no declarará por primera vez ante la jueza el responsable del atropello, la representación letrada de la víctima va a presentar una queja ante el Consejo General del Poder Judicial por grave disfunciones en el procedimiento judicial. Una queja que salpica también a la Fiscalía de Cádiz, «en cuanto que no ha hecho aún nada a pesar de que tiene encomendada una especial atención en este tipo de asuntos de enorme impacto social», señala Luis Romero.
El conductor Hilario B. C., que dio negativo en la prueba de alcoholemia practicada horas después del accidente, reconoció que arrolló a Adrián en su declaración ante la Policía Local, la cual la hizo sin estar imputado ni detenido. Afirmó que no vio al joven cuando cruzaba un paso de cebra y que no le dio tiempo a frenar.
«Sin luces y a gran velocidad»
Según las conclusiones recogidas en el atestado policial, en la zona no hay marca de frenado y tras el fuerte impacto, el cuerpo fue lanzado a más de 30 metros de distancia . No hay referencias sobre la velocidad a la que iba el turismo, «pero en su declaración ya reconoce el conductor que podía ir a 40 cuando la zona está limitada a 30 kilómetros por hora». Los amigos que acompañaban a Adrián y fueron testigos del siniestro, dicen que el vehículo viajaba sin luces y a gran velocidad .
«A esta persona que había atropellado a un peatón y había abandonado el lugar, no se le traslada a los juzgados inmediatamente después de tomarle declaración. Ni se ha acordado ninguna medida cautelar como la retirada del carné. Tampoco se le hizo la prueba de drogas». La prohibición para circular y el ingreso en prisión provisional serán solicitados por el letrado Luis Romero cuando acudan a los juzgados el próximo octubre.
Antonio Vázquez , hermano del herido, quiso expresar el «inmenso dolor» ocasionado en la familia por «el subinspector de la Policía Local que afirmó públicamente a un medio local que el autor del atropello se había parado tras el accidente pero que se marchó por razones que no podía desvelar. Eso es mentira y tendrá que responder por ello».
Su anterior letrado ya denunció a principios de agosto irregularidades en la tramitación del atestado por parte de la Policía Local conileña; si bien no se ha practicado diligencia alguna al respecto.
En la familia están convencidos de que alguien quiere proteger al causante del accidente ; «mientras que nosotros tenemos que convivir con este inmenso dolor».
Adrián Vázquez fue trasladado este lunes a una clínica de Badalona especializada en la rehabilitación de enfermos en coma profundo. Aunque la aseguradora del coche que ocasió el accidente está sufragando algunos gastos del tratamiento, parte de la familia ha tenido que trasladarse a la localidad catalana para estar junto al joven lebrijano, a quien le queda una larga e incierta rehabilitación por delante.
Por eso solicitan la colaboración ciudadana para ayudarles en los gastos de los cuidados del joven. Para ello han abierto una cuenta en el Banco Santander donde recogen aportaciones. El número es 00496711992490358867 .
«Ojalá caiga todo el peso de la ley sobre ese hombre. Mi hermano es un chico muy inteligente, que iba a empezar a trabajar como maestro. Alegre, vital, emprendedor que de la noche a la mañana se ha quedado postergado en una cama», ha descrito su hermana Pilar.
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