De las subastas para buscar nuevas minas a los primeros contratos en Aznalcóllar: los próximos hitos del sector

La empresa que aguarda para reabrir la mina de Aznacóllar ya ha adjudicado los primeros contratos necesarios para reanudar la actividad. Minera Los Frailes ha seleccionado a Idom para que realice la ingeniería de la planta de tratamiento de minerales y, por otro lado, ha preajudicado a Aqualia, por 50 millones de euros, la estación de tratamiento de agua.

Una vez que reciba la autorización definitiva, la compañía contempla realizar una inversión cercana a los 150 millones de euros y espera alcanzar la primera cámara de mineral en 2027. En primer lugar, Minera Los Frailes iniciará la construcción de la planta para tratar el recurso obtenido y de otra para las pastas. También pondrá en marcha las balsas y canalizaciones

La nueva explotación ya ha superado todos los trámites ambientales y, previsiblemente, logrará antes de que acabe el año la autorización minera definitiva. En estos momentos, se ha abierto el plazo de audiencia de la propuesta de resolución a los interesados en el expediente y una vez finalizado, la Junta analizará la documentación presentada por los alegantes. Tras ello, se elaborará la propuesta de solución definitiva, que se elevará a la Dirección General de Minas para su consideración y expedición de la autorización minera.

Este yacimiento lleva más de dos décadas sin actividad y aún cuenta con reservas de unos 45 millones de toneladas de minerales, principalmente de zinc, cobre y plomo.

Minera Los Frailes prevé invertir en total unos 450 millones de euros durante los 20 años se prolongaría la actividad. De ellos, en los tres primeros se dedicaría a la construcción y los restantes a la explotación. El impacto en el empleo será de unos 1.200 entre directos e indirectos.

Buscar minas es el primer paso para contar con nuevas explotaciones en el futuro. En los próximos meses, varias decenas de empresas podrán investigar el subsuelo de los municipios andaluces para conocer qué minerales alberga.

Los recursos mineros son de dominio público y la administración debe velar por que se aprovechen y exploten de la manera más eficiente. Por ello, las empresas interesadas en realizar investigaciones tienen primero presentarse a concursos públicos.

Tras casi una década sin convocarse estas 'subastas' en Andalucía, la Consejería de Industria, Energía y Minas sacó esta suerte de licitaciones para que los interesados pujen por estos terrenos. Algunas provincias, como Córdoba, ya han adjudicado sus zonas, mientras que se espera que en los próximos meses se cierre el resto.

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Noelia Ruiz

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En el caso de Sevilla hay 14 compañías con candidaturas, mientras que en Huelva participan ocho empresas. Entre los interesados figuran nombres como Laín Technologies, Pan Global, Minas de Estaño de España, Kerogen Energy, Emerita, Alto Minerals, Cobre Las Cruces o Minera Los Frailes.

Más allá de las firmas que se postulan, esta convocatoria es especialmente interesante porque las empresas que no han participado podrán optar a aquellos terrenos que hayan quedado desiertos porque no contaran con ningún interesado o este no reuniera los requisitos.

En estas zonas ya no había ninguna actividad minera y en la jerga del sector se les conoce como derechos mineros caducados. En concreto, se han convocado más de 360 repartidos por las ocho provincias.

Una vez que estén adjudicados, las empresas iniciarán sus estudios para conocer con exactitud el subsuelo. Una de las técnicas más empleadas son los sondeos, que consisten en pinchazos a gran profundidad para tomar una muestra del subsuelo. Tras ellos, se evalúa el potencial del recurso.

Otra de las grandes incógnitas es el futuro de la mina de Cobre Las Cruces. Su dueña, First Quantum, le colgó el cartel de 'se vende' hace ya casi un año después de que sufriera un duro revés judicial en Panamá, donde obtenía una fuente muy relevante de sus ingresos.

Este proyecto generó un «gran interés» entre las compañías del sector por su ubicación y porque en él pueden extraerse minerales durante otros 20 años. En una primera fase, atrajo a media docena de inversores internacionales que estudiaron comprar el yacimiento.

Tras ello, se abrió una segunda ronda con los interesados finales. Previsiblemente, First Quantum cerrará la operación en los próximos meses, aunque la compañía ha evitado hasta ahora ofrecer ningún tipo de plazo.

En la última cita de esta minera con sus inversores, un analista preguntó públicamente si podían dar un horizonte temporal para la venta y si esperaban completarla en los próximos seis meses. A esta consulta, el director financiero, Ryan MacWilliam, respondió que «el proceso de venta seguía en marcha» sin entrar a valorar los tiempos.

Más allá del precio de venta, la inversión necesaria para volver a ejecutar el proyecto es de más de 780 millones de euros porque se precisa desarrollar una refinería en la que tratar los minerales que se obtengan en el futuro. Hasta ahora, esta mina ha sido de una excepcionalidad pocas veces vista en el mundo. De ella se han obtenido minerales con una rentabilidad hasta doce veces superior a la de otros yacimientos similares.

Sin embargo, una vez agotado este primer recurso (algo que ocurrió en el año 2021), la empresa estudió un nuevo proyecto de minería subterránea con el que conseguir cobre y otros metales y para el que es necesario el citado desembolso.

La ventaja de este yacimiento es que cuenta con los permisos necesarios para ponerlo en marcha y, durante estos meses, se han realizado algunos trámites relevantes. La empresa Lantania completó la ampliación de la planta de tratamiento de aguas.