Flamenco SinCejilla
Festival Valle Gitano, un cambio de ciclo en el flamenco
A los Jardines del Valle de Sevilla llegan jóvenes figuras y valores de este arte, como Rancapino Chico, María Terremoto, Anabel Valencia y El Farru
Luis Ybarra Ramírez
Será que, como estudia la sociología, los ciclos son cada vez más cortos o que estamos ante un cambio radical de ciclo. Tal vez ambas cosas hayan coincidido en apenas unos pocos años. Casi meses. El mundo no era diferente hace diez años, sino hace ... dos. Y el festival Valle Gitano, que celebra su tercera edición este sábado 11 de septiembre en los Jardines del Valle, viene a confirmar esta alteración natural que se ha producido de forma sigilosa en lo que al flamenco se refiere. Una nueva generación se ha impuesto . Este mismo cartel, con María Terremoto, de 21 años; Rancapino Chico, de 33; y Anabel Valencia, de 35, a la cabeza hubiese sido imposible remontándonos únicamente un lustro en el tiempo. Quien pone el baile, El Farru, comparte fecha de nacimiento con el de Chiclana. Son figuras jóvenes. No promesas. Realidades en las que se evidencia que aquellos que comenzaron su andadura en los 60 y 70, en su mayoría desaparecidos, han cedido su lugar a quienes vienen detrás. Pansequito apenas se anuncia. Juanito Villar, algo más. Rancapino, con más escombros que nunca en la garganta, ha dado un paso atrás para que sea su hijo el que gobierne en el escenario. El Pele parece una rareza. Como José de la Tomasa, solo entre los suyos. Los maestros del cante han perdido presencia , mientras que la juventud ha irrumpido con gran notoriedad.
Un peldaño por encima, siempre guiándonos por la edad, están Luis de Chimenea, Mari Peña y El Borrico , también presentes en la cita sevillana. El atractivo de la actuación conjunta que han preparado no reside en la frescura ni en la experiencia, sino en la singularidad del encuentro. «Compare, dígame usted,/si desde Cai a Sevilla/hay que pasar por Jerez», cantaban Lole y Manuel. Pues eso: el triángulo donde se resumen las esencias del arte jondo quedará representado en una estampa. Uno es de Lebrija, el de Chimenea. Otra, de Utrera, la Peña. Y el último, por supuesto, de Jerez, de una de las disnastías que más cuenta con menos: la del cante recortado de Tío Borrico, su abuelo. Los tres, además, comparten ese carácter genuino que empapa a los artistas que ante el público solo muestran lo que vivieron puertas adentro. Lo jondo como hábito. Como cultura en sí. Como expresión. A las guitarras, por su parte, estarán Nono Jero, Curro Vargas, Antonio Higuero, Antonio Moya y José Gálvez, escuderos de un festival que presume de ser uno de los más jóvenes de la historia.
A beneficio de las obras asistenciales de la Hermandad de los Gitanos , entidad que lo organiza, también se rendirá homenaje al personal sanitario que ha combatido la pandemia en primera línea. Así se evocará la sentencia machadiana de que «cantando la pena, la pena se olvida». Con la voz y la palabra. Con la guitarra y el cuerpo. Con la reivindicación de lo gitano en una mueca de dolor añejo continuamente renovado. La verdad es infinita y su revelación no se agota.
Serranito aplaza su concierto en Sevilla
El músico madrileño, un histórico de la guitarra que en verano anunció su gira de despedida de los escenarios, iba a inaugurar el ciclo Flamenco Viene del Sur el próximo jueves 16 de septiembre en el Teatro Central. Su cita, por motivos de salud , según ha expresado su oficina de representación a través de un comunicado, tendrá que esperar hasta el 3 de octubre . ABC ha podido confirmar que no es grave lo que le sucede a Víctor Monge Serranito. Espera, de hecho, llegar en plena forma a un concierto en Málaga el 24 de este mes. Las entradas adquiridas podrán ser devueltas o intercambiadas por la nueva fecha programada.
Sevilla es una de las ciudades esenciales en este último recorrido por la geografía española. Han pasado más de cinco décadas desde que paseando por Triana escuchase, sorprendido, sus falsetas desde una ventana. Serranito le ha dado varias vueltas al globo con la sonanta de concierto, llevándola a los mejores espacios con una técnica lúcida, del Queen Elizabeth Hall de Londres al Carnie Hall de Nueva York. Fue descubierto por Valderrama , con quien actúa en la película ‘El emigrante’, aunque como bailaor. Su vida, ya ve, tiene tantas anécdotas como acordes.
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