El Virgen del Rocío extenderá la robótica a todas sus cirugías, incluidas las de casi todos los cánceres

«En un futuro más cercano del que se puede creer la digitalización permitirá ir aprendiendo de las propias experiencias y gracias a la inteligencia artificial los cirujanos vamos a poder ver a tiempo real todo lo que está ocurriendo y compararlo con imágenes de otras operaciones anteriores que nos pueden ayudar a tomar las decisiones correctas, mejores decisiones médicas, y evitar errores. Con asistencia robótica todo será más seguro y se podrán salvar más vidas», añade.

El Virgen del Rocío cuenta en este momento con un equipo Da Vinci de los 9 que hay en Andalucía. E l coste de este robot ronda los dos millones de euros pero con él el cirujano consigue un nivel máximo de precisión a través de una visión aumentada y tridimensional, lo que reduce la posibilidad de que aparezcan complicaciones.

 El robot dispone de cuatro brazos quirúrgicos que reproducen fielmente y en tiempo real cada uno de los movimientos que ejecuta el cirujano desde una consola ubicada junto a la mesa en la que está el paciente. «Los brazos robóticos permiten frente a la laparoscopia convencional el acceso a localizaciones del abdomen especial mente complejas , como puede ser la pelvis, además de que consiguen una amplitud de movimientos de los instrumentos en el interior de las cavidades imposible de lograr de otro modo por cirugía mini-invasiva», explica el doctor Daniel Díaz, coordinador médico del área quirúrgica y director de la comisión de robótica del hospital. La visión tridimensional, frente a la bidimensional de la laparoscopia convencional permite integrar imágenes de alta resolución, ampliándolas hasta quince veces. Los movimientos se verifican 1.500 veces por segundo, lo que permite corregir cualquier desviación o temblor que pudiera tener el especialista, que requiere de una gran destreza y capacitación técnica.

El mayor avance está produciendo en la cirugía general y digestiva. Con el robot se evita la agresión de una cirugía abierta convencional y una incisión de 10-20 centímetros, que se sustituye por 4 ó 5 pequeños orificios algo mayores de un centímetro para cada trocar de trabajo, lo cual reduce los efectos secundarios de la intervención (incluidos los estéticos) y el ti empo de convalecencia del paciente, así como la estancia hospitalaria y, por tanto, los costes asociados al ingreso. Además de las indicaciones clásicas como la cirugía en cáncer de próstata, en la que el equipo robótico está siendo fundamental para acelerar el tiempo de recuperación de los resultados funcionales de la zona operada (trastornos urinarios y sexuales) actualmente también se hacen nefrectomías parciales y cistectomías radicales. También se usa para resolver patología ginecológica tumoral, fundamentalmente casos de cáncer de cuello uterino y cáncer de endometrio . En cáncer de cuello uterino, además de las histerectomías radicales con linfadenectomía (extirpación del útero, cuello uterino y ganglios linfáticos de la pelvis), resultan singulares los abordajes con técnicas robóticas puras sin usar la vía vaginal. En el tórax se comenzó con la extirpación de timo, pero en la actualidad los especialistas realizan también lobectomías pulmonares (eliminación de zonas pequeñas de un pulmón) en casos de tumores.

 A pesar de los excelentes resultados obtenidos por el robot desde su implantación (destacan las intervenciones sobre el cáncer de recto, donde se puede resecar y reconstruir el colon, el recto, el ano y el tejido perirrectal evitando trastornos urinarios, sexuales y defecatorios), el Virgen del Rocío no ha profundizado demasiado en su implantación desde 2007, como reconoce Daniel Díaz: « Hasta marzo de 2021 no había evolucionado nada, hubo un estancamiento por una conjunción de motivos, entre ellos, la formación de personal de Enfermería, la acreditación de facultativos, problemas de unidades de cargo económico. El caso es que en el resto del mundo había seguido evolucionando y nosotros nos habíamos quedado en el planteamiento inicial».

Hasta esa fecha el robot se utilizaba solo cuatro o cinco mañanas a la semana en el hospital sevillano y ahora se usa durante cinco mañanas y cinco tardes, gracias a lo cual los cirujanos han duplicado las intervenciones asistidas (de 143 a 256 cirugías anuales) , aunque es previsible que en los próximos años se tripliquen, o más, y se conviertan en algo habitual en los quirófanos del mayor centro sanitario sevillano.

 « La rentabilidad del robot se cubre a partir de las 250 intervenciones y ya hemos superado ese umbral, aunque tenemos mucho margen de crecimiento», asegura el doctor Díaz . La creación de un Comité de Robótica donde los especialistas de estas áreas se reúnen para organizar y optimizar el uso de estas operaciones ha disparado el número de intervenciones asistidas y ya se han iniciado sobre la pared abdominal (hernias y eventraciones) y están en vías de iniciarse también c irugías sobre hígado, páncreas, esófago y estómago . Para estas últimas el empleo del robot resulta una enorme aportación, pues se trata de intervenciones muy agresivas, asociadas a un gran número de complicaciones, algunas de ellas potencialmente graves y que a partir de ahora podrán prevenirse mejor mediante el uso de esta herramienta.